Loading...
Invitado


Domingo 26 de abril de 2015

Portada Principal
Cultural El Duende

Günter Grass “visto” por Borges

26 abr 2015

El 10 de octubre de 1999, tras conocerse la noticia de que Günter Grass acababa de ganar el Premio Nobel, en el periódico La Nación de Buenos Aires, apareció una nota que lo evocaba, firmada por la escritora argentina María Esther Vásquez.

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

En estos días en que la prensa ha prodigado (verbo tan borgeano) homenajes al recientemente fallecido escritor alemán, reproducimos la nota, como un eslabón más de esa cadena. Dice el texto:

En el otoño europeo de 1964, Borges visitó la que era entonces República Federal Alemana y fue a Berlín. Allí asistimos, yo lo acompañaba, al Congreso por la Libertad de la Cultura donde estaban los más importantes escritores de la época, desde Miguel Ángel Asturias a Günter Grass.

Grass tendría entonces treinta y tantos años. Muy moreno, de ojos grandes y oscuros, poblados bigotes, pelo renegrido, alto y algo corpulento, parecía más bien centroamericano. Tanto, que empecé a hablar con él en español, que desconocía, y seguimos con un francés dudoso hasta que descubrí su germanidad y continuamos la charla en una mezcla divertida en la cual predominaba el alemán.

Cuando le conté a Borges quién y cómo era Günter Grass, quiso saber qué había escrito. Le narré con bastante detalle la trama de El tambor de hojalata. La historia de Oscar, el protagonista de esa novela, lo asombró. “¿Pero se puede llegar a algo con ese argumento?”, preguntó.

Es evidente que siguió pensando el asunto. Lo conversó con Eduardo Mallea, que también había asistido a aquel encuentro, pidiéndole opinión. Y dos o tres días después, cuando el Congreso y Grass y sus bigotes habían quedado atrás, Borges me dijo: “No. No lo veo como un logro posible”

El tiempo y la Academia Sueca no le dieron la razón.

Para tus amigos: