El huerto escolar una estrategia educativa para la convivencia con la Madre Tierra
24 abr 2015
Rebeca Hurtado Rueda
• Omar Rolando Coca Lara
Actualmente en nuestro país vivimos un cambio, de política educativa, apegado al denominado desarrollo progresivo, ya que a partir de la duración se van estimulando procesos de producción y autoproducción en las comunidades educativas y el proceso pedagógico de las maestras y maestros; ello, para valorar la producción a partir de la autoproducción alimentaria comunitaria, y dejar de estigmatizar al producto agrícola por su aspecto, su precio, su transformación para su uso inmediato ocasionando la desaparición de la cultura agrícola y alimentaria comunitaria.
Muchas personas piensan que en el establecimiento educativo sólo se aprende dentro del aula. Pero no se consideran los espacios o terrenos que ofrecen como lugares para aprender sobre la naturaleza, la agricultura y la nutrición donde se puede aprender en las parcelas el cultivo de hortalizas y autosustentar la alimentación comunitaria para desarrollar en la y el estudiante un aprendizaje crítico, reflexivo, práctico y productivo en armonía con la Madre Tierra.
Por ello, el huerto escolar, es un espacio pequeño, donde se cultivan hortalizas para consumo de la comunidad escolar y funciona en terrenos disponibles dentro del establecimiento. En caso de insuficiente terreno, se pueden utilizar balcones, azoteas, cajas. En el mismo, pueden cultivar plantas cuyas semillas, raíces, hojas o frutos son comestibles.
El huerto escolar es una actividad importante que repercute positivamente en las y los estudiantes en su aprendizaje teórico-práctico, involucrándose en el cultivo de los alimentos, aprendiendo temáticas sociocomunitarias productivas sobre la naturaleza y los alimentos, y ello estimulará en las y los estudiantes a trabajar en equipo y fomentar el compañerismo.
El huerto escolar efectiviza cambios temáticos desde una perspectiva vivencial y de responsabilidad personal. El trabajo socioeducativo en el huerto escolar facilita el desarrollo de una práctica educativa acorde con los contenidos del nuevo Modelo Educativo Sociocomunitario Productivo para el vivir bien en comunidad y nuestro Estado Plurinacional, que estimula al ser social a la autosuficiencia alimentaria comunitaria, el cuidado de la Madre Tierra y el Medio Ambiente, que implica:
- Educar en el medio ambiente real, para investigar, trabajar verdaderamente en el medio natural y relacionar temáticas afectan a nuestro entorno.
- Educar en la comunidad del medio, ya que el huerto es un sistema ecológico, en que se pueda relacionar la interdependencia del ser humano que tiene con la Madre Tierra y otros sistemas de vida.
- Educar a favor del medio, estimulando en los estudiantes valores y actitudes de comportamiento más respetuosos y críticos para el cuidado y mantenimiento del medio ambiente.
El trabajo del huerto escolar, está pensado a partir de los nuevos lineamientos sociocomunitarios educativos de gestionar el cuidado de la Madre Tierra, en usos no perjudiciales para la tierra, en la diversificación y protección de cultivos, en la conservación de aguas y suelos, en definitiva, pensamos en un tipo de educación productiva y de cuidado el medio ambiente.
Es así, que el trabajo de las maestras y maestros al implementar el huerto escolar consistirá en seleccionar, organizar y secuenciar los contenidos temáticos a trabajar, definir distintos niveles de complejidad en su tratamiento y distintos contendidos didácticos, de forma que las y los estudiantes desarrollen la sensibilización, criticidad y concienciación hacia el medio ambiente y la capacidad de combinar la conservación del medio con la utilización sostenible de los recursos naturales.
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