Bolivia y Chile: extraña unión contra Perú

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Bolivia y Perú siempre estaban aliados ante cualquier contingencia, incluso en la Guerra del Pacífico de 1879. El enemigo común era Chile. Bolivia perdió su salida al mar y Perú tuvo que resignar ante Chile la región de Arica. Después de 131 años de aquella guerra, la estrategia internacional boliviana ha cambiado y se incentiva una amistad profunda con los chilenos.

Perú busca reivindicar 35.000 kilómetros cuadrados de territorio marítimo, que se encuentran en poder de Chile, desde 1954, a causa de una confusa interpretación de dos medidas que sirven para la delimitación del uso de las aguas marinas. Bolivia, en vez de apoyar esa iniciativa, anticipa la derrota de Perú, en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

Perú reclama la “línea media” como criterio de delimitación, mientras Chile sostiene que el criterio acordado en 1954 es el “paralelo geográfico”. La diferencia entre una y otra medida, permite establecer un total de 35.000 kilómetros cuadrados en disputa.

LOS PARALELOS

Evaristo Pentierra, en términos muy simples, explica cuáles son las medidas que tienen valor y cómo se debe efectuar la interpretación, para resolver esta clase de conflictos, para el uso de las aguas marítimas, especialmente para la pesquería.

Los “paralelos geográficos” son todos los círculos imaginarios trazados alrededor de la tierra y situados en paralelo a la línea ecuatorial. Para Chile, la frontera marítima con Perú es delineada por la línea paralela del punto en que la frontera terrestre alcanza la orilla del mar. Esta posición sería inobjetable si la costa peruano-chilena fuera perfectamente rectilínea. El problema nace a partir de lo sinuoso que suelen ser las líneas costeras. Los territorios de Perú y Chile no son la excepción.

Una posibilidad de “respetar” las irregularidades de las líneas costeras consiste en trazar la frontera marítima de forma equidistante a los diversos puntos de la línea costera. Éste es el procedimiento previsto por la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR).

El artículo cinco de la Convención establece que “la línea de base normal para medir la anchura del mar territorial es la línea de bajamar a lo largo de la costa”. Dado que el límite entre mar y tierra varía según marea alta o baja, se ha convenido en tomar la marea baja (”bajamar”) como punto referencial.

LA LINEA MEDIA

Al trazar el territorio marítimo de ambos países de forma equidistante a su línea de base nos damos cuenta que, empleando este método, el territorio peruano rebalsa el chileno y viceversa. Previendo está situación, el capítulo 15 de la CONVEMAR propone la “línea media”:

Cuando las costas de dos Estados sean adyacentes o se hallen situadas frente a frente, ninguno de dichos Estados tendrá derecho, salvo acuerdo en contrario, a extender su mar territorial más allá de una línea media cuyos puntos sean equidistantes de los puntos más próximos de las líneas de base a partir de las cuales se mida la anchura del mar territorial de cada uno de esos Estados.

LA POSICION PERUANA

Perú plantea por vía diplomática “fijar un punto medio (equidistante) entre los puntos más próximos de ambos países, para medir la anchura del mar territorial que le corresponde, recuperando, de esa forma, los 35.000 kilómetros cuadrados de territorio marítimo”.

Para la recuperación del territorio marítimo, el Ejecutivo y el Congreso peruano han tomado las acciones diplomáticas en forma unida, para definir el límite marítimo con Chile. En base a esos argumentos, se presentó la demanda ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

Según Pentierra, la reciente “Ley de líneas de base del dominio marítimo del Perú” da el primer paso en esta dirección. Determina las líneas de base a partir de las cuales, en un paso posterior, se podrá medir el dominio marítimo peruano. La definición según lo establecido en la CONVEMAR significaría más de 35 mil kilómetros cuadrados adicionales para el Perú.

LA POSICION CHILENA

Chile afirma que el Perú no tiene facultad de establecer su dominio marítimo en base a la línea media. Aduce que ya existen convenios bilaterales en los cuales el Perú reconoce la línea paralela como límite marítimo. El artículo 15 de la CONVEMAR deja en claro que la “línea media” solamente es válida de no existir “acuerdo en contrario”.

Según Chile, ese acuerdo es el “Convenio sobre Zona Especial Fronteriza Marítima”, firmado en Lima en diciembre de 1954 por Perú, Ecuador y Chile. El convenio nace a raíz de un problema muy concreto: La dificultad de los pescadores artesanales en reconocer la posición exacta de las fronteras marítimas. Para hacerles la vida más fácil, se decide crear una zona especial, a partir de las 12 millas marinas de la costa, de 10 millas marinas de ancho a cada lado del paralelo que constituye el límite marítimo entre los dos países.

Perú sostiene que el convenio, al tratar el tema específico de la pesquería, no tiene la jerarquía suficiente para fijar el límite territorial. Por otro lado, el texto deja en claro que el límite marítimo entre Perú y Chile es constituido por el paralelo.

DEFENSA DE CHILE

Chile presentó el 9 de marzo de 2010, ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya, la respuesta a la demanda interpuesta por Perú para modificar los límites marítimos entre ambos países, con la convicción de que sus argumentos son "sólidos".

"La razón jurídica está de nuestra parte y, en ese sentido, confiamos en lo que determine la Corte", dijo el representante chileno ante la CIJ, Alberto Van Klaveren.

Adelantó, sin embargo, que sea cual sea la sentencia la acatarán porque "somos un país respetuoso con el derecho internacional. Lo hemos respetado en el pasado y lo seguiremos respetando".

Según Van Klaveren, se ha entregado "un documento muy sólido que consta de seis volúmenes, cuatro anexos y un apéndice que incluye cartografía", aparte del planteamiento jurídico preparado por expertos en materia internacional.

Los argumentos de Chile, dijo Van Klaveren, "son sólidos porque están basados en tratados internacionales, suscritos en 1952 y 1954, y en los límites fijados que se han respetado a lo largo del tiempo por Chile, la comunidad internacional y también por Perú".

La política internacional al respecto no variará con el cambio de gobierno en Chile, que se hizo el pasado 11 de marzo. Ni siquiera ha variado un milímetro en el contenido ni se ha solicitado la ampliación del plazo, como consecuencia del terremoto, que sacudió el centro y sur chileno, el pasado 27 de febrero, días antes de la asunción del nuevo presidente, Sebastián Piñera.

“Los trabajos ya se habían realizado y culminado antes de la tragedia", dijo el representante chileno.

Perú podrá hacer uso de su derecho a réplica si así lo desea. Después, seguirán audiencias orales, para que el Tribunal de La Haya tome conocimiento de los argumentos técnicos y jurídicos al respecto.

El tribunal emitirá su sentencia antes de 2012.

A pesar del litigio internacional, los dos países mostraron una imagen de unidad tras el terremoto de 8,8 grados de magnitud en la escala abierta de Richter que sacudió Chile. El presidente peruano Alan García visitó Santiago de Chile el 2 de marzo, acompañado por 25 médicos y 30 toneladas de ayuda humanitaria para los damnificados por el seísmo.

EVO ADELANTO QUE PERU PERDERA LA DEMANDA

El presidente Evo Morales manifestó públicamente su deseo de que Perú pierda la demanda con Chile, porque tiene el objetivo de perjudicar a Bolivia en su búsqueda de una salida al mar.

Bolivia perdió su acceso a la costa del Océano Pacífico, en la guerra de 1879 y, desde entonces, a pesar de haber firmado con Chile un Tratado de Paz y Amistad de 1904, reclama una reivindicación del litoral.

"Tengo la información de que el Gobierno peruano sabe que la demanda la va a perder", dijo Morales. La declaración fue emitida el 28 de mayo de 2009 y publicada por el diario chileno La Tercera.

Sin embargo, consideró que ese problema debía ser resuelto mediante el diálogo, pero insistió en que el gobierno peruano sólo quiere perjudicar a Bolivia, para que no tenga salida al mar. "En el fondo es eso", dijo Morales.

Es la primera vez en la historia que un presidente boliviano exprese su oposición a las aspiraciones de Perú. Antes que Evo Morales asuma el poder, el 2006, todos los gobiernos y mandatarios bolivianos mantenían los lazos de hermandad con Perú, sea cual sea la orientación política e ideológica.

En la actualidad, los gobiernos de Bolivia y Chile mantienen una fluida “relación de confianza” desde el 2006. Habían visitas mútuas de los presidentes de ambos países, encuentros y reuniones de amistad, visitas de delegaciones de alto nivel, seminarios y reuniones de confraternidad a todo nivel.

No ocurre lo mismo entre los gobiernos de Bolivia y Perú, desde que el presidente peruano Alán García concedió asilo a tres ex ministros del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada que deben someterse a un juicio de responsabilidades por la muerte de más de 60 personas en la ciudad de El Alto, en 2003.

"Ellos están acusados en Bolivia de crímenes de lesa humanidad y no se les puede conceder asilo ni refugio. Y Alan García sabe eso. Es una abierta provocación. Tal vez quiere vengarse de nuestras diferencias ideológicas y políticas", afirmó Morales.

"Mi problema no es con Perú, es con su gobierno, con su presidente (Alan García)"..., "los problemas nacen cuando se vive una permanente agresión de parte del gobierno del Presidente del Perú", dijo.

El canciller peruano José Antonio García Belaúnde, justificó el asilo otorgado a tres ex ministros bolivianos con la desconfianza sobre la eficiencia de la justicia boliviana.

BOLIVIA Y CHILE

La hermandad entre los pueblos de Perú y Bolivia (quechuas y aymaras) se mantenía desde antes de la colonia y este apoyo incluyó todos los temas tratados diplomáticamente, incluida la demanda marítima boliviana, a través de la cual ambas naciones reclamaban a Chile la devolución de sus territorios.

La estrategia nunca funcionó para Bolivia debido a que el tratado de 1929 le impide a Chile entregarle a nuestro país una salida al mar por territorio que antes fue peruano, sin autorización del Gobierno de Lima. Chile no puede disponer de otro territorio, pues si lo hiciera la franja territorial soberana para Bolivia partiría en dos su territorio.

Perú jamás aceptó ceder ese espacio para Bolivia. Ahora Evo Morales cambió esa estrategia y negocia cualquier iniciativa con Chile dejando de lado a Perú. Bolivia encara una mesa de negociaciones con 13 puntos, en forma directa con Chile. También decidió abandonar la estrategia de resolver este tema en el ámbito multilateral y se afianza la solución de ese conflicto marítimo sólo entre Chile y Bolivia.

Fuente: LA PATRIA