Sancionan al diplomático brasileño que ayudó a senador boliviano
11 abr 2015
Fuente: Brasilia, 10 (EFE).-
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El ministerio brasileño de Relaciones Exteriores sancionó con una suspensión de veinte días al diplomático brasileño Eduardo Saboia que ayudó en la fuga hacia Brasil del senador opositor Roger Pinto Molina, que alegaba ser un perseguido político, informaron fuentes oficiales.
La sanción que le fue impuesta al diplomático brasileño Eduardo Saboia por el Corregidor del Ministerio de Exteriores fue publicada en el boletín interno de la cancillería hoy (ayer), un año y ocho meses después del incidente que provocó un conflicto diplomático entre ambos países.
La suspensión fue el resultado de un proceso disciplinario interno para determinar la responsabilidad de Saboia en un caso de ruptura de la jerarquía, por haber ayudado en la fuga del parlamentario boliviano sin autorización ni conocimiento del gobierno brasileño.
Saboia admitió ante sus superiores que Pinto Molina fue transportado en un automóvil oficial de la embajada, escoltado por soldados brasileños, hasta la fronteriza ciudad de Corumbá, a la que llegó en agosto de 2013 sin que el gobierno boliviano hubiese expedido el debido salvoconducto.
Desde allí viajó hacia Brasilia en un avión fletado por el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado brasileño, Ricardo Ferraço, quien le recibió en Corumbá.
El senador Pinto permaneció alojado durante 445 días, desde el 28 de mayo de 2012, en la embajada de Brasil en La Paz, en donde esperaba que el gobierno brasileño le concediese un asilo político.
Saboia, que en la época ejercía como encargado de negocios de la embajada y sustituía temporalmente al embajador, alegó que insistió varias veces ante la cancillería para que adoptase una decisión sobre la situación de Pinto Molina, de quien dijo que sufría depresión y problemas renales.
El diplomático alegó que incluso solicitó su traslado a otro país ante la demora del gobierno en resolver la situación. El incidente generado con Bolivia por la salida de Pinto, opositor del Gobierno de Evo Morales y acusado por la justicia de su país de delitos de corrupción, obligó a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, a sustituir a su entonces canciller, Antonio Patriota.
Igualmente desde entonces Bolivia exige la deportación del senador Pinto y la embajada brasileña en La Paz permanece sin titular.
La actual situación del opositor en Brasil depende de que la Comisión Nacional de Refugiados (Conare), que depende a su vez del Ministerio de Justicia, se pronuncie sobre la petición de refugio solicitada por el senador.
Pinto afronta ante la Justicia boliviana cinco juicios por supuesta corrupción y, en uno de ellos, ya ha sido condenado a un año de prisión, razones en las que se escudaba el Gobierno de Morales para negarle el salvoconducto necesario para abandonar la embajada.
Fuente: Brasilia, 10 (EFE).-
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