Sábado 07 de febrero de 2015
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Los padres tienen diversas maneras de ejercer autoridad sobre sus hijos, por lo que encontramos diversos estilos de crianza, algunos adoptan cierto comportamiento y establecen reglas en su hogar para tener mayor control sobre el comportamiento de los mismos.
El estilo educativo que tienen los padres puede variar, pero encontramos algunos que tienen un comportamiento autoritario, es decir tienen poca comunicación con sus hijos y no les permiten ninguna falla ni tampoco dan opción de explicaciones.
Este tipo de comportamiento sólo ocasiona que los hijos oculten mucha información a los padres por miedo a la reacción que éstos puedan tener prefieren ocultar o mentir y así se evitan de conflictos como también de regaños o castigos.
Cuando los padres son autoritarios afectan en gran medida la autoestima de los hijos, porque crecen con inseguridad y temor, pueda que sean obedientes con las actividades que tengan, pero la parte afectiva se desarrolla pobremente y serán poco espontáneos.
Los extremos nunca son productivos, es decir ejercer demasiada autoridad puede orillar a que surjan otro tipo de conductas en los hijos que serán contraproducentes en su desarrollo y crecimiento, como también en la forma de pensar que tengan.
Fuente: LA PATRIA
