Martes 20 de enero de 2015
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La idea antropocéntrica del ser humano y el pensamiento de que la naturaleza es una fuente inagotable a su servicio, el consumo masivo, la sobrepoblación, la industrialización, etc., han incidido en el deterioro del medio ambiente, cuyos efectos negativos como el cambio climático, el calentamiento global etc., tienen su repercusión en el planeta y cuya preocupación tendría que atingir a todos los individuos no solo a los ambientalistas ya que del futuro de la tierra dependerá nuestra existencia y condiciones de vida.
La interdependencia del ser humano con las demás especies vivientes para la subsistencia ha dado lugar al paradigma del biocentrismo que considera al ser humano una parte más de los subsistemas que se complementan y todos forman parte del sistema vital, no existiendo la preeminencia de superioridad o inferioridad simplemente todos formamos parte de la cadena de vida, a partir de ésta perspectiva puede velarse por el desarrollo armonioso, pero sobre todo responsable con el medio ambiente y asegurando que las generaciones venideras tengan el mismo derecho de satisfacer sus necesidades como lo hacen las presentes.