El Rally Dakar deja huella en Bolivia

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El Gobierno nacional, hizo una inversión de tres millones de dólares, para que el Rally Dakar tenga su paso por territorio boliviano, este año fueron tres días de competencia de manera que el gasto fue mayor, dos millones más que en la gestión 2014, cuando esta competencia pisó suelo boliviano por primera vez.

Ni duda cabe que los bolivianos se identifican con esta prueba que en otrora se disputaba en Europa y África de manera que solo podíamos verlo por televisión.

El Rally Dakar, fue creado el año 1977 con el lema “Un desafío para aquellos que parten. Un sueño para quienes se quedan”, empezando en Paris para culminar en Dakar (capital de Senegal). Conforme fueron pasando los años, esta competencia se convirtió en la más importante y competitiva del mundo.

Uyuni en esa oportunidad fue el centro de atención debido a que los motorizados llegaron a esa población, no se pudo cumplir el sueño de correr en el Salar de Uyuni, pero se demostró una gran organización. Es por eso que la ASO, decidió que en esta gestión 2015, la competencia en Bolivia sea por tres días y además del ingreso de las motos, cuadriciclos y coches, no así los camiones.

Claro el presupuesto es mucho más, en este caso se pagó algo así como tres millones de dólares para que esta competencia que tanto apasiona a los bolivianos, se corra por los departamentos de Oruro y Potosí.

Por supuesto ante semejante inversión, la gente empezó a preguntarse en qué puede beneficiar al país el paso del Rally Dakar por territorio boliviano. Las autoridades en su momento brindaron la explicación, arguyendo que lo que se genera es mucho más de lo que se supone.

“Por cada dólar que invertimos recibimos 6 y esto es consumo de combustible, alimentos, hotelería, es un movimiento único y es que estamos en el mejor momento, fin de año, vacaciones en enero”, manifestó el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana.

Puso como ejemplo que en la gestión en 2014 se invirtió al menos 10 millones de dólares (en forma global), en servicios básicos, energía eléctrica, agua potable y mejoramiento del Regimentó Loa, para luego recibir un monto económico de 62 millones de dólares como ingresos.

Se espera que este año al ser mayor la inversión los réditos por supuesto también sean mayores.

Además la autoridad, señaló que la competencia internacional es utilizada por los bolivianos para defender nuestras danzas típicas y hacer conocer al mundo que Bolivia tiene su cultura.

HUELLA

Con todo esto sin duda que el paso del Rally Dakar por Bolivia deja una huella bastante honda, para muchos de manera positiva por la explotación de la riqueza cultural del país, para otros una pérdida de recursos económicos y daños ambientales. Pero lo que sí está claro es que este acontecimiento internacional, despierta el interés de mucha gente.

Naturalmente los más beneficiados son los pobladores de las zonas por donde hizo su paso esta prueba, en este caso Oruro y Potosí, particularmente Pisiga, Opoqueri, Belén de Andamarca, San Martín, Uyuni, Llica, Salinas de Garci Mendoza y Ollagüe, poblaciones de Oruro y Potosí que vibraron el rugir de motores y que ahora son mucho más conocidos en el contexto internacional.

Pero quizá hubiese sido mejor promocionar un poco más este acontecimiento, particularmente en Oruro, porque si bien se hizo el anuncio respectivo, la presentación oficial y por ahí algo de publicidad, faltó lo más importante en este caso material de información como trípticos, mapas y otros, como ocurrió en la gestión pasada, al perecer este año las autoridades, particularmente quienes están como responsables de la Secretaria de Turismo y Cultura dependiente de la Gobernación de Oruro, no hicieron mucho para orientar a la gente en este aspecto.

Es el caso concreto de lo que sucedió en Pisiga y Opoqueri, mucha gente se trasladó hasta esos lugares, pero a la llegada no tenían ninguna información de lo que sucedería, menos saber a dónde debían dirigirse para observar la competencia, por eso es que muchos tuvieron que abrirse caminos para llegar al lugar, algo que por supuesto no puede volver a repetirse el próximo año, si es que se desarrolla nuevamente esta competencia en el país.

PRÓXIMO AÑO

Es un poco complicado asegurar a esta altura que el Rally Dakar, volverá a pasar por territorio boliviano, porque si bien la organización estuvo acertada, el clima nos jugó una mala pasada, particularmente el domingo por la tarde y el lunes en la mañana, justo cuando las motos y cuadriciclos estaban en competencia.

La lluvia y el fuerte frío impidieron que la competencia se desarrolle con normalidad, incluso antes de la partida ayer en el Salar de Uyuni, los pilotos se reunieron y se rehusaron a querer competir en la octava etapa, menos mal la ASO se puso firme y exigió que la prueba se realice y todo pueda continuar como se había planificado.

Pero al final no faltaron malos comentarios entre pilotos que decían que los organizadores no tomen en cuenta a Bolivia para el desarrollo de la competencia por las bajas temperaturas, sin embargo este hecho, o en este caso la decisión de que pase el Dakar por Bolivia o no, corresponde a los organizadores quienes seguramente harán una evaluación y en coordinación con el gobierno boliviano, tomen las decisiones que el caso aconseje.

De cualquier manera, el paso del Rally Dakar por Bolivia, deja una honda huella en los bolivianos que sin duda aguardan con impaciencia que esto se vuelva a repetir en próximo año e incluso el ingreso de los participantes sea completo, en este caso al margen de los coches, motos y cuadriciclos, también puedan ingresar al país los camiones. Las condiciones están, Bolivia ofrece toda una riqueza natural para el desarrollo de este evento considerado el más importante del mundo.

Fuente: LA PATRIA