Miercoles 24 de diciembre de 2014
ver hoy
En esta fecha, es costumbre recordar, repetir estas palabras a parientes y amigos traducidas en deseos que, cada vez son más superficialmente interpretadas cuando, en realidad, encierran un profundo sentido humano, como el entendimiento tácito para el mantenimiento de unas buenas relaciones, mutuamente beneficiosas, entre los individuos, a distintos niveles; el consenso entre distintos grupos, clases o estamentos sociales dentro de una sociedad; es manantial de serenidad, de alegría, de tranquilidad, es como entrar en un oasis de luz y de amor". La paz es un valor fundamental para la vida de las personas, las familias y las naciones del mundo.
Pero, todos sabemos que la paz es un valor que suele perderse fácilmente de vista por múltiples razones. Por ejemplo, cuando la justicia está ausente en la relación de las personas; cuando los gobernantes creen que son dueños de la verdad y tienen a la justicia sólo como un medio para imponer caprichos políticos y personales; como un medio para imponer su voluntad, utilizando las leyes como un arma de represión, o cuando las leyes son utilizadas para librarse de candidatos “peligrosos”, que pueden alterar los planes electorales del MAS. Es entonces cuando la paz desaparece, para convertirse sólo en un enunciado vacío y un pretexto para apoderarse de los gobiernos, haciendo de ellos un totalitarismo secante que no permite la existencia de la paz, como una forma de convivencia equilibrada.