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Domingo 07 de diciembre de 2014

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Cultural El Duende

EL MÚSICO QUE LLEVAMOS DENTRO

La Música en Bolivia: de la Prehistoria a la actualidad

07 dic 2014

Conclusiones del Simposio Internacional de Musicología realizado en Cochabamba entre el 3 y 5 de octubre de 2001 con motivo del XIII Festival Nacional “Luz Mila Patiño”

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1. Se señaló el carácter multidisciplinario del Simposio como un hecho central para la consecución de los estudios sobre música (Ricardo Céspedes, Leonardo Waissman). La heterogeneidad de las temáticas, los diversos enfoques metodológicos y disciplinarios, enriquecieron la aproximación general sobre las temáticas musicales y su relación con los grupos sociales y la historia. La posibilidad de generarse estudios transdisciplinarios se planteó como uno de los desafíos de aquí para adelante en la investigación sobre música en todas sus facetas.

2. Gerard Borras puntualizó que la música se encuentra “en jeu de porvoir”, (en juego de poder). La música es cosa de poderes y vector de poder; tal aspecto fue señalado por más de un expositor, y hubo coincidencia en ubicar los fenómenos musicales y de producción sonora en conexión con los sistemas de relaciones sociales de poder. En los hechos musicales y sonoros se disputan poderes y posiciones sociales; esta problemática surgió como un tema central de los debates y como propuesta para próximos encuentros de investigadores.

3. Un tema mencionado fue el de los condicionamientos nacionales a los objetos de investigación, como señalaron Leonardo Waissman e Irma Ruiz. Las investigaciones así deben plantearse olvidando las fronteras nacionales e incluso las barreras del Océano Atlántico. Se trata de encarar objetos de estudio más complejos que los delimitados por las fronteras políticas, tanto desde los estudios históricos como de los contemporáneos. Asimismo, los investigadores necesitan estar integrados más allá de esas fronteras para abordar problemáticas similares.

4. Se sugirió que para próximos encuentros, se podrían escoger “temas-eje” en torno a los cuales giren las ponencias y los debates. Varios de estos temas pueden salir ya de este primer Simposio, cuyo desarrollo mostró el estado de la cuestión en general. A partir de aquí, las problemáticas específicas podrían abordarse más profundamente.

5. Se planteó la necesidad, de manera conjunta a los trabajos investigativos, de valorar e incorporar en los estudios sobre música a los investigados, a los músicos tradicionales de las comunidades, los músicos populares, los músicos profesionales, y todos aquellos ligados al campo musical (Carlos Espinoza, Fernando Ballivián). De hecho, la participación de músicos, promotores de los derechos de autor, profesores de música, estudiantes de ciencias sociales y otros, como oyentes, significó un primer momento de acercamiento entre la lógica académica de las investigaciones con los sujetos productores de música y sentidos musicales.

6. Varios participantes del Simposio señalaron la necesidad de continuar con los contactos activos (Roberto Fernández, Irma Ruiz, Fernando Ballivián, Walter Sánchez y otros) Irma Ruiz sugirió la posibilidad de ingresar en la lista de la Asociación Argentina de Musicología; Fernando Barragán la de crear un espacio de debate específico por e-mail. Walter Sánchez, a su vez, sugirió que otro espacio disponible para los contactos es la Red Iberoamericana de la Música.

7. La posibilidad de aunar el trabajo de historiadores y musicólogos, antropólogos, etnomusicólogos, físicos, sociólogos y otros fue vista como un elemento potenciador de las investigaciones sobre música boliviana, no solo a nivel disciplinario, sino también personal.

8. Walter Sánchez resumió los logros del Simposio en tres puntos:

Primer éxito: la multidisciplinaridad y multidimensionalidad

Segundo éxito: El hecho que todos los participantes han aprendido mucho de los demás, un enriquecimiento académico tanto como humano.

Tercer éxito: La transversalidad de los análisis.

Fuente: Fundación Simón I. Patiño.

Editor: Wálter Sánchez Canedo

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