El matrimonio

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Como todos tenemos conocimiento el matrimonio es el sacramento en el que Dios mismo bendice la unión y el amor de un hombre y de una mujer, una gran mayoría se encuentra casado y tienen una familia que llegó a convertirse en su tesoro más valioso.

El matrimonio no es un juego, por lo mismo uno debe tener la suficiente madurez no sólo como persona sino también económica para poder sacar adelante a su familia, un hombre y una mujer se casan por amor, para buscar el bien de los dos y no para complacer a ambas familias.

El matrimonio permite crecer como pareja, como también da lugar al surgimiento de una nueva vida, puede llegar a convertirse un ambiente de confianza, entendimiento, solidaridad y de reto a la trascendencia, de un matrimonio deben formarse personas sanas, alegres que tengan la capacidad de amar.

Todo matrimonio se ve afectado por los problemas y aunque todo parecía estar bien de repente los problemas empiezan a aparecer en los momentos más importantes, en lugares inesperados, son inoportunos y uno no sabe cómo solucionarlos.

Es bueno estar consciente que los problemas siempre existirán pero se debe encontrar la manera de remediarlos, aclararlos en su momento, no dar a pensar malas interpretaciones, pedir disculpas si son necesarias, teniendo el cuidado de que no se convierta en costumbre y que uno piense que puede lastimar a su pareja y con el hecho de pedir disculpas se borra y soluciona el conflicto, para evitar este detalle ante todo debe haber respeto en todo sentido a la pareja y evitar momentos desagradables más aun si uno sabe que esto orillará a tener problemas.

Uno de los beneficios es que se recibe la orientación de los padres, pero antes de decidir si se deben inmiscuir o inhibir en algo, se debe analizar profundamente, el modo de hacerlo o no hacerlo, así como las consecuencias que podría originar esa decisión, tanto si la decisión es mantener o fomentar un pensamiento, decir unas palabras o realizar unos hechos.

Es importante mantener una distancia y no inmiscuirse del todo en los problemas que presenta el matrimonio, suele ocurrir que el matrimonio anda muy bien pero por decisiones de otros familiares o actos realizados surgen problemas o mejor dicho ocasionan problemas a la pareja.

El matrimonio no significa desconectarse de las familias pero este paso cuesta a muchas personas ya sea a los hijos o a algunos padres, ya que las costumbres que tienen los padres quieren que no se pierdan y se repitan en el matrimonio de sus hijos no dejándolos desenvolverse ni darse la oportunidad de crecer como pareja.

Es cierto que el ejemplo a seguir es el matrimonio de los padres más aun si llevan una vida intachable, pero también los hijos pueden crear nuevas costumbres, tomar decisiones y criar a sus hijos de manera diferente, son éstos actos que permitirán fortalecer los lazos familiares de un matrimonio y antes de recurrir a otros actos o creencias que sólo vuelven insegura a la pareja no dejar de lado la oración, es el secreto más básico y crítico para tener éxito en el matrimonio.