Un anuncio del frente oficial y una réplica política preelectoral de oposición, ponen nuevamente en el tapete de las dudas el delicado asunto referido al proyecto ferroviario bioceánico, que según la fuente gubernamental pasará por el Departamento de Oruro; en tanto que la posición política señala con cierta vehemencia que Oruro fue excluido del proyecto ferroviario bioceánico central.
Este tema se arrastra de algunos meses atrás cuando justamente se hicieron algunas apreciaciones técnicas sobre la construcción de una red ferrocarrilera que uniría específicamente el sector oriental, Santa Cruz y su proximidad con un puerto de Brasil en el océano Atlántico, con el Puerto peruano de Ilo en el océano Pacífico, pasando justamente por el vasto territorio boliviano, aunque se decía por un limitado trecho del occidente boliviano.
Naturalmente tal apreciación causó preocupación y molestia en “la orureñidad” al frustrarse uno de sus mayores anhelos, ser parte material de la dinámica que significa el uso de los corredores bioceánicos, terrestres y ferroviarios, insoslayables en cualquier proyecto, gracias a la excepcional y estratégica posición geográfica de Oruro en el contexto nacional, pero sobre todo en las conexiones internacionales.
Proyectar la construcción de un sistema ferroviario excluyendo Oruro era poco menos que imposible, debido a las características de terreno, la incuestionable ubicación como centro ferroviario nacional y aunque, por razones especiales se pretenda minimizar sobresale el factor de proximidad directa con los puertos del norte chileno, caso de Antofagasta e Iquique y Arica al que también se accede por La Paz.
Pero qué dicen en el Ministerio de Transportes sobre el tema. De acuerdo a una carta enviada a la Brigada Parlamentaria desde el Viceministerio de Transportes, un párrafo de la misma afirma que “El trazo ferroviario nacional que vinculará los océanos Atlántico y Pacífico, atravesará por el Departamento de Oruro, con una propuesta ferroviaria moderna para carga y pasajeros propia de la tecnología del siglo XXI”. Entendiendo la propuesta que menciona carga y pasajeros, resultaría inadmisible no contar con una estación de operaciones que debe estar muy cerca a la ciudad.
En la misiva en cuestión, hay un párrafo contradictorio que sin embargo tendrá que ser aclarado para constatar su viabilidad, señala: “El alineamiento de la red ferroviaria atravesará el departamento de Oruro, desde Cochabamba rumbo a La Paz, por las características de este tren, por cuestiones de operación y seguridad, el bioceánico no atraviesa por ninguna ciudad capital”. Lo que se detecta como contradictorio con el anterior párrafo es que se habla de una propuesta ferroviaria moderna para operaciones de carga y pasajeros, en los siguientes renglones menciona Cochabamba y La Paz, atravesando por Oruro, pero sin tocar “ciudades capitales”. Cómo y de qué modo se originarán los viajes, si se entiende que se trata de un servicio comercial que en cada destino debe recoger, carga y pasajeros, precisamente por ser bioceánico y con opción de “barajar” varios destinos específicos en su ruta.
Lo último de la cartica viceministerial es que el servicio ferroviario tendrá relación con los proyectos de Oruro, como el Puerto Seco y el Parque Ecológico Central (¿?), además de que estaría en análisis la posibilidad de emplazar la maestranza principal del proyecto en Oruro.
Hay que leer y releer esa misiva, tarea importante para los parlamentarios, pero también para la dirigencia institucional, profesional, empresarial y laboral de nuestra región, para definir una estrategia departamental que exija aclaraciones muy precisas sobre un proyecto que en los hechos demuestra en el caso de Oruro, la analogía con ese dicho… “Todos los caminos conducen a Oruro”.
Fuente: LA PATRIA
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