No todo se presenta con puntos excepcionalmente positivos en materia del sistema económico nacional, pese al mantenimiento de las macro cifras en la reserva internacional o esos montos millonarios en reserva, pues hay algunos traspiés que alteran el ciclo regular de su crecimiento.
Una información del Ministro de Economía y Finanzas Públicas, revela que en el segundo trimestre de la gestión en curso se produjo un descenso en el crecimiento de nuestra economía, señalando además que si bien el hecho no es preocupante, tuvo incidencia negativa por tres factores.
El principal corresponde a la poca inversión pública debido a que la misma se acelera, de manera casi general en el país, a partir del segundo semestre cuando los municipios, gobernaciones y universidades empiezan a mover sus presupuestos que no lo hicieron en los primeros meses, por el ajuste de las cuentas y el rezago en el manejo de la inversión.
Otro hecho connotativo y que influye en la marcha de la economía, es el que corresponde a la producción minera, disminuida no precisamente en volumen pero sí en la recuperación de recursos a causa de la baja cotización de los minerales en los mercados externos. Ese hecho se refleja en la menor percepción de regalías mineras y en una reducción presupuestaria en planes de desarrollo de varios departamentos, particularmente los dependientes de la extracción y exportación de sus materias primas.
Aunque anteriormente no se tomaba en cuenta al sector agropecuario, como factor relacionado directamente con el crecimiento de la economía, en la ocasión presente la autoridad financiera del país reconoció un “retraso en la producción agropecuaria” debido a varias causas que se espera eliminar en la última parte de la gestión. Las inundaciones y sequías son los elementos negativos que alteraron el trabajo productivo en el campo, tanto entre los agricultores y con fuerte incidencia negativa en el sector de los ganaderos.
El crecimiento de la economía nacional se redujo a partir del mes de marzo en un porcentaje del 5,61%, en abril bajó a 5,34% y en mayo a 5,24%, relación expresada por el Índice Global de la Actividad Económica, que es el indicador mensual o medidor del desarrollo económico en el territorio nacional, que señaló un crecimiento sostenido de la economía boliviana en 6% desde principios del 2013 hasta febrero del 2014.
Las causas de la reducción en el crecimiento se explican en los tres factores ya señalados, ratificándose que existen problemas en la ejecución presupuestaria por parte de las alcaldías y las gobernaciones atribuyendo las autoridades tal demora al sistema burocrático vigente en las esferas gubernativas, cuando se trata de aprobar los proyectos formulados. El modelo debería ser revisado y materializado en un esquema de mayor fluidez gestionaria para mejorar la ejecución presupuestaria y evitar el vaivén en el ritmo del crecimiento económico.
En cuanto a la cotización internacional de minerales, es poco lo que se puede hacer, salvo la predisposición estatal para impulsar con incentivos especiales las actividades mineras de alto rendimiento, garantizando las inversiones y completando la Ley Minera con una adecuada reglamentación y la aprobación de un régimen tributario competitivo y no restrictivo.
La agricultura y ganadería podrán recuperar sus pérdidas y el tiempo perdido con soportes especiales que disponga el poder ejecutivo, para reacondicionar este sistema productivo de alto valor económico sensible a los cambios climáticos y las adversidades naturales.
Fuente: LA PATRIA
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