De acuerdo a información oficial, los residuos tóxicos mineros producto de una fisura en el dique de colas de la Mina Santiago Apóstol se derramaron al curso del río Pilcomayo, cuyas aguas discurren también por territorios de Argentina y Paraguay, a cuya jurisdicción no llegaron los elementos contaminantes, según la versión del ministro de minería, César Navarro. La autoridad reveló que una comisión interinstitucional de alto nivel se desplazó por toda la zona de influencia en el curso de las aguas del Pilcomayo, tomando muestras que permiten asegurar que los efectos contaminantes no llegaron a la zona fronteriza, situación que se presentó en un informe de circunstancias.
Admite la fuga de material
tóxico en el dique de colas
Mario Cano Cruz, propietario del ingenio minero Santiago Apóstol ubicado en jurisdicción potosina, admitió que un “sifonamiento evacuó 1.400 metros cúbicos o 2 toneladas de residuos mineros”. La confirmación del hecho establece además que gran parte de la carga contaminante llegó a la zona de Canutillos, donde se concentra la mayor parte de los desechos. El empresario minero señaló que inmediatamente de percatarse del accidente en el dique de colas se ordenó la paralización de operaciones para impedir que más agua llegue al depósito dañado, disponiéndose además el “tapado” del dique en la bóveda dañada controlando el derrame de más elemento contaminante. La confesión del empresario le valió entre sanciones quedar en resguardo carcelario.
Potosí recauda el mayor
porcentaje de regalías
La actividad minera en Potosí permite a ese departamento lograr la mayor recaudación nacional de regalías mineras con casi un 60 % del total que se genera entre los departamentos productores de minerales. Un informe del Senarecom, señala que Potosí en cuatro meses del año, recibió 216,8 millones de bolivianos. El segundo lugar en obtención de regalías mineras lo ostenta La Paz con 83,8 millones de bolivianos que significa el 23 % de recaudación, dejando el tercer lugar para Oruro que obtuvo el 10 % de percepción de regalías mineras con 38 millones de bolivianos. Posteriormente se ubica Santa Cruz con 16,2 millones, el Beni con 8,5 millones y Cochabamba con 4,7 millones de bolivianos. Después están Pando, Chuquisaca y Tarija.
Persiste explotación ilegal
en una mina avasallada
El propietario de la mina Puerta del Sol a mediados de julio pasado denunció reiterativamente que avasalladores de esa propiedad minera ubicada a 25 kilómetros de la ciudad de La Paz, están explotando oro, estaño y bismuto sacando esa producción vía contrabando al Perú y Chile, ocasionando a nuestro país una pérdida aproximada de 10 millones de dólares mensualmente. El caso se produjo hace meses atrás, cuando comunarios de la región tomaron la mina violentamente, destruyendo parte del campamento y apropiándose de equipos, maquinaría y del mineral, que ahora es sacado ilegalmente sin que ninguna autoridad intervenga para evitar el cuantioso despojo. Es una de las minas avasalladas en el último tiempo sin que la autoridad ministerial haga cumplir sus propias decisiones de sancionar con severidad los avasallamientos.
Sanción para culpables
de la toma de una mina
Sobre el tema que mencionamos en la nota superior, la toma violenta de la mina Puerta del Sol en la proximidad de la ciudad de La Paz y ejecutada por comunarios de la Provincia Los Andes, se aplicará una sanción penal directa, según lo señaló el ministro de minería César Navarro una vez que se comprueben los delitos de avasallamiento y contrabando de minerales, hechos que han sido denunciados por el propietario de la mina ocupada y por trabajadores de la misma que igualmente fueron despojados de su fuente laboral y sus herramientas. Lo llamativo en la actitud de la autoridad ministerial es que se recuperará el predio ocupado pero para el Estado, se confiscará equipo y maquinaria y se iniciará acción penal contra los avasalladores. No se dice nada de reposición de daños al propietario de la mina.
Concesionaria de mina potosina
confrontó problemas sociales
La Comibol y la empresa canadiense Pan American Silver Corporation están trabajando bajo la modalidad de un contrato de riesgo compartido para explotar un interesante yacimiento de plomo, plata y zinc en bruto con una producción de 800 a 1.000 toneladas brutas. Todo se desarrollaba regularmente, empero a mediados del pasado mes surgió un problema entre los trabajadores de la mina San Vicente que pidieron la renuncia del gerente general de la misma, Eusterio Huerta, de nacionalidad peruana, a quien denunciaron de varias irregularidades y especialmente de crear división entre los trabajadores, perjudicando la producción de la mina. Se pidió el retiro del gerente y a propósito del asunto el presidente de la Comibol, refirió que el conflicto es de orden interno entre la empresa y sus trabajadores, sin embargo, ejercerá una tarea de mediación para evitar complicaciones que afecten la producción minera.
Fuente: LA PATRIA
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