Crueldad humana

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Como si se tratara de un cuento de terror, las mascotas del hombre tienen que pasar por una serie de pruebas difíciles que les impone la vida y muchas veces la factura que deben pagar es con su propia vida.

Realmente la necesidad de obtener recursos económicos no mide consecuencias, ni siquiera para los comerciantes, quienes ven en los animales como una fuente amplia de riqueza, así estos seres vivientes sean comercializados en montos mínimos de dinero.

La forma en que lo hacen, se podría decir que es prácticamente y si el término se acomoda de “inhumana” o podríamos decir “inanimal”, ahora que la moda es la de inventar términos.

EL OPERATIVO

Hace algunos días, a raíz de la denuncia de un ciudadano, quien por azares del destino se acercó allí, nos referimos al mercado Bolívar, en busca de un gatito, para hacer frente a una visita indeseada, como los ratones.

Hecho que obviamente le llamó la atención y no le quedó otra alternativa que hacer la denuncia respectiva. Ante ese hecho la Oficina de Defensa al Consumidor del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO) con el sargento Pedro Siles a la cabeza, organizó un operativo en coordinación con el Centro Municipal de Zoonosis y los voluntarios del Grupo Unido de Animalistas Oruro (GUAO).

Fue el martes 15 de julio que irrumpieron en la pasividad del sector de venta de animales que se encuentra en la segunda planta del sector Noreste del Mercado Bolívar.

En el lugar ya estaban varias comerciantes de este gremio, quienes se vieron sorprendidas por la presencia de los “azules” como de los representantes de las otras instituciones, quienes comenzaron a hacer una revisión, conocer el trato que se les da a las mascotas, en qué condiciones están, en esas diminutas jaulas y saber el estado de salud de los animalitos.

El panorama fue deprimente, quizás sólo aquellas personas que tienen una alta sensibilidad, podrían llenar sus ojos de lágrimas al ver esa escena horrorosa. Los animalitos, gatos, perros, patos, pollitos, gallinas, gallos, conejos hasta un ratón blanco hacinados entre ellos y en varias jaulas.

Los gatos, crías en su mayoría, estaban en pequeñas jaulas y también en cajas de cartón, lloraban y pedían con sus maullidos ser liberados. Estaban hambrientos, hecho que se demostraba en sus raquíticos cuerpecitos, sus ojos estaban llenos de lagañas, su pelo alborotado y muy descuidado, lo que significa que su alimentación no es buena.

Un pequeño gato, fue sorprendido solo y fuera de todo ese encierro. Seguramente, logró salir de alguno de los orificios y trataba de darse a la fuga, pero como estaba muy débil, las fuerzas no le daban para avanzar más allá. Además que estudiaba el terreno para saber por dónde iría, sin embargo, fue capturado para ponerlo en condiciones.

En otra de las jaulas se encontró un grupo de varios gatitos, uno de ellos, cuyo cuerpito era gris con blanco, estaba echado. Cuando se lo sacó de la jaula, agonizaba, tenía las pupilas dilatadas y a un paso de despedirse de este mundo cruel, cuya factura de haber nacido en esa condición, era pagarla con su propia vida.

Los voluntarios sacaron al minino, la idea era que reciba la atención de un veterinario, sin embargo, a los pocos minutos falleció en manos de uno de los miembros de la comitiva.

La revisión continuó y si bien los animalitos no entendían qué sucedía, pese a su aspecto demostraban que no todo era malo, un par de gatos mantenían su buen humor y ante la adversidad uno de ellos se dedicó a jugar con la cola de una gallina que estaba próxima a él. Mientras que otro gatito jugaba con la cabeza de uno de sus compañeros, que instantes previos logró sacar la testa de un cajón de cartón.

A medida que eran sacados de sus encierros, se acomodaban en las manos de sus rescatantes, con sus patas dobladas en señal de estar conformes con lo que sucedía. Asimismo, lograban lamer la mano de sus héroes anónimos en medio de maullidos y ronroneos.

PERRITOS

Los perritos, crías en su mayoría tenían una mirada triste, varios de ellos con lagañas y moquillo. Sin poder expresar lo que vivían a diario, miraban mudos a sus nuevos captores, algunas de estas mascotas movían la colita en señal de alegría. Pero otros, se encontraban temerosos y temblorosos, porque estaban conscientes que su destino sería la muerte, debido al estado en el que se encontraban.

De las jaulas, a medida que eran abiertas, se iban rescatando a las mascotas, principalmente, perros y gatos. En una de esas tantas jaulas, en una caja de cartón se encontró el cadáver de un pequeño can, estaba más duro que una piedra y su cuerpo más frío que un glaciar. Según el veterinario que lo revisó en ese momento, dijo que la data de su muerte era de dos días.

A las cajas de cartón se les abrieron varios orificios, se colocaron a todos los animalitos rescatados para finalmente ser llevados al Centro Municipal de Zoonosis, situado en la zona Norte de la ciudad de Oruro.

AVES

Sin embargo, antes de partir continuó la revisión y el turno fue de las aves de corral, gallos y gallinas, de la misma manera hacinados. En uno de los puestos de venta se encontró a una gallina que apenas podía mantenerse de pie y no porque estaba ebria, sino que su jaula era tan pequeña que su posición era más que incómoda, para graficar la escena, era como si una persona estuviera de cuclillas por días.

Ni los voluntarios ni las autoridades pudieron sacarla de la jaula, fue la dueña del puesto, quien torpemente le agarró de las patas, la volcó y la sacó como si fuese un objeto inerte, hecho que provocó el reclamo de los voluntarios de GUAO.

El panorama no fue distinto en todo el sector, las aves estaban más que presas, pero tenían ventaja ya que su plumaje más su hacinamiento, por lo menos las mantenían calientitas.

En otro sector, se halló una caja con una veintena de pequeños patitos, esperando que alguien los compre para salir de su encierro, miraban absortos a la comitiva que si bien solo observó, no los rescató, ya que la competencia del operativo era solo para perros o gatos, como quien dice, se sintieron discriminados, pero sacarlos del lugar, hubiese significado también atentar contra el patrimonio de las comerciantes, que solo algunas dieron la cara, ya que las otras prefirieron desaparecer del lugar, hasta que pase la tormenta.

Antes que termine el operativo, se encontró a un ratón blanco que yacía en una jaula que estaba sobre el piso de cemento, deambulando de un lado para otro, esperando que el hombre defina su suerte.

COMERCIANTE

La secretaria general de la Asociación de Comerciantes “Simón Bolívar y Ramas Anexas”, Mery Cámara justificó que el frío es lo que ocasionó que varios animalitos estén enfermos.

“Ahora que hayan encontrado animalitos muertos a mí no me consta, sin embargo, le dije a la mamá del joven que los separe si estaban mal. Algunos están con tratamiento, pero tampoco están a la venta”, dijo.

Respecto a la mala alimentación de los gatos, dijo la dirigente que se les da comida balanceada y no se les da cualquier comida.

“Pero no todos comen bien. Vendemos los gatos a diez bolivianos, a veces a cinco y otras veces los regalamos porque más se van enflaqueciendo. Ya no agarramos en cantidad ¿Ha visto en cantidades? Hay que hablar con cada una de ellas, deben saber porqué agarran tantos. Incluso se les ha dicho que va a ser prohibida la venta de animales, perros y gatos, pero no hacen caso”, afirmó.

Indicó que se dijo a los intendentes que pasaron en el cargo, que contraten a un veterinario para que haga una revisión periódica del estado de los animales que están a la venta.

“Pero, no nos hacen caso. Sabemos que en el zoológico también hay un veterinario pero no vienen. Pero repito, nosotros siempre los vendemos con medicamentos y en especial, en esta época de frío les damos medicamentos. Esta venta de gatos y perros debe disminuir y con el tiempo debe desaparecer. La Alcaldía debe practicar la esterilización de animales, porque los animales se van multiplicando y qué hacen los dueños, sino les compramos, los botan por ahí y a los agentes les consta, tanto perro y gato están botados. Yo estoy muy de acuerdo en que no tenga que haber la venta del perro y del gato, porque da pena, yo soy la que cierro la puerta y seguramente no les abrigarán y comienzan a llorar los gatos”, afirmó.

DEFENSA

El jefe de la Oficina de Defensa al Consumidor del GAMO, sargento Pedro Siles lamentó cómo se encontraron a las mascotas en el sector de la venta de animales del mercado Bolívar.

“Qué lamentable que hemos podido detectar, había animalitos que se encontraban muertos en las jaulas, hay falta de higiene, no hay limpieza, algunos animales estaban desnutridos. Vamos a sancionar a aquellos (comerciantes) de los puestos de venta que no están cumpliendo con la normativa”, señaló.

Mientras que el administrador del Centro Municipal de Zoonosis, Jaime Corrales aseguró que las mascotas fueron encontradas en un mal estado de salud.

“Tenemos dos animalitos muertos encontrados en los recintos que ellos manejan, en la venta de animales, presumiblemente con moquillo, están enfermos y en mal estado de salud, desnutridos, con diarreas y eso no se puede permitir. Se ha procedido al decomiso de absolutamente todos los animales”, afirmó.

Mientras que la presidente de GUAO, Maribel Méndez, manifestó que observaron con tristeza e impotencia el maltrato animal por las vendedoras de ese sector del mercado Bolívar.

“Se encontraron desde jaulas completamente sucias, hasta cachorros muertos en cajas. Cabe resaltar el hallazgo de perros y gatos moribundos, en completo estado de desnutrición y en su mayoría enfermos con moquillo o parvo virus, gallinas hacinadas, animales expuestos al sol, sin agua ni comida”, afirmó.

Asimismo, agradeció el gesto del Jefe de la Unidad de Defensa al Consumidor por atender su llamado de preocupación desde hace varias semanas, tras observar la forma cruel en la que son tratados los animalitos. Ponderó también la labor del Centro de Zoonosis que se encargó de decomisar y trasladar a los animalitos enfermos para que sean atendidos, los cuales serán objeto de observación de GUAO que se encargará del control, para luego dar en adopción a las mascotas.

“Continuaremos en estos operativos sorpresa hasta hacer entender a las autoridades que la venta de animales debe prohibirse por completo en la ciudad. No sea cómplice del maltrato animal, dígale no al comercio de animales. Un ser vivo no se compra ni se vende, adopte un callejerito”, añadió.

Los miembros del GUAO recordaron a la ciudadanía que existe un Reglamento Municipal: sobre tenencia de animales, control y prevención de enfermedades zoonóticas, derechos de los animales; con respaldo de la Ordenanza Municipal 044/2011 que en su artículo 57 dice lo siguiente:

“Queda prohibida la exposición y venta de cualquier tipo de animal de compañía en áreas públicas como calles, parques, paseos, áreas internas y externas de mercados, así como exhibirlas en las cercanías de aeropuertos, estaciones de trenes, terminal de buses, lugares de feria, edificios y otros”.

Fuente: LA PATRIA