Martes 15 de julio de 2014

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Editorial y opiniones
A construir vías ferrocarrileras en Bolivia
15 jul 2014
Por: Ciprián Lípez Uño
Ya son más de dos siglos en que se construyó el primer ferrocarril del mundo en Gran Bretaña. Los primeros fueron usados en las minas desde 1804 y luego de pasajeros en 1830. En Bolivia, fue el Presidente Aniceto Arce que gobernó 1882-1892, el impulsor del ferrocarril Antofagasta-Oruro. Luego se construyeron vías ferrocarrileras que vinculaban Santa Cruz-Puerto Suárez, Santa Cruz-Yacuiba, Challapata-Villazón, y otros.
Son muchos años en que no se construyeron líneas de ferrocarriles. Se desnacionalizaron, y una empresa chilena tomó e inhabilitó los ferrocarriles que unían Cochabamba-Oruro-La Paz. El actual Gobierno ofreció a los orureños un tren de 200 kilómetros por hora, La Paz-Oruro, con crédito chino. Hasta ahora no pasó nada.
Las naciones democráticas avanzadas tienen varios ferrocarriles, que no sólo desarrollan su economía, sino que tienen además un carácter social. Donde los estudiantes y los pobladores pagan muy poco dinero.
En Bolivia deben construirse tres líneas principales para su desarrollo. La línea oriental, que una Riberalta-Santa Cruz-Yacuiba, la red occidental que parta de la ciudad de Cobija-La Paz-Oruro-Villazón, y la tercera que una Puerto Suárez-Santa Cruz-Cochabamba-Oruro-Pisiga. Nuestros trenes deben ser modernos, confiables, limpios y rápidos. Deben tener una velocidad de por lo menos 400 kilómetros por hora. El uso de materiales de tracción del vapor, del gas y de la electricidad ya forman parte de la historia. Los nuevos productos de arrastre deben buscarse en los laboratorios.