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Viernes 09 de mayo de 2014

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Perspectiva Minera

Auditoría Técnica y Económica en las empresas mineras

09 may 2014

Por: Luis Aramayo López

Después de tres años de trámites se aprobó la ley 3156 que permitió la participación de los municipios de Huanuni, Machacamarca, Poopo, Antequera y Pazña, de las utilidades de los contratos de riesgo compartido de las empresas Huanuni y Bolívar, fue un primer intento de beneficiar a los municipios mineros.

Esta ley está vigente desde el año 2005 y será conveniente ampliar para todos los municipios donde se realiza actividad minera.

Otra iniciativa personal que tuve fue dejar a la brigada parlamentaria en la persona del señor Edgar Sánchez Aguirre, otro proyecto de ley el Nº 281/04-05 que tiene que ver con la creación de las diferentes direcciones departamentales, entre las más importantes de la minería y la metalurgia.

La finalidad de crear la dirección de minería y metalurgia en los departamentos productores de concentrados de minerales, como Oruro, Potosí, La Paz, tenía el objetivo de precautelar los intereses de las regiones, tales como las regalías y los impuestos que deben pagar las empresas.

Las atribuciones más importantes de las direcciones departamentales a crearse era la de fiscalizar los procesos de producción independientemente si la empresa sea estatal o privada y esta se realizaría implementando auditorias técnico-económicas, para saber cuántas toneladas de minerales procesa cada mes, que clase de productos se obtiene, cual es la eficiencia del proceso, cuales son las utilidades, donde se comercializa la producción y que cuidados toman las empresas en la preservación del medio ambiente. Estas auditorías deberían realizarse de una manera periódica pero planificada (en otras ocasiones las empresas no reparten lo que realmente ocurre, especialmente en los ingenios).

Para poder apreciar las diferencias que puedan existir en un proceso productivo si no hay fiscalización y control social, veamos a continuación los siguientes pequeños dos balances que corresponde a la empresa minera Huanuni, más propiamente al ingenio Victoria, estos datos pertenecen a la gestión 1996.

Balance metalúrgico de general

datos de la Empresa Minera Huanuni

PRODUCTO % PESO % SN % DISTRIBUCIÓN PRODUCTO % PESO % SN % DISTRIBUCIÓN PRODUCTO

Concentrado Final 3.42 39.9 65.00 Concentrado Final 3.43 39.10 65.01 Concentrado Final

Colas 96.58 0.76 35.00 Colas 96.59 0.77 35.01 Colas

100.00 2.10 100.00 100.01 2.11 100.01

Balance metalúrgico de la operación

elaborado por el Ing. Luis Aramayo

PRODUCTO % PESO % SN % DISTRIBUCIÓN

Concentrado Final 4.60 44.50 74.97

Segundo Pecir 7.51 2.11 5.79

Colas finales 87.89 0.58 19.24

100.00 2.70 100.00

Como se puede apreciar de los dos balances correspondientes a la misma época existen diferencias importantes, entre ellas la ley de cabeza reportada por la empresa es mucho menor que la ley de cabeza con la que se hicieron las pruebas metalúrgicas; aun así la recuperación del proceso apenas llega al 65%, lo que quiere decir que no hay un control minucioso del proceso de concentración del ingenio Victoria, aunque probablemente haya cambiado la situación actual.

Entre los argumentos que se exponían para la creación de las direcciones departamentales de minería y metalurgia se decía lo siguiente: En todo país, como en la sociedad es imperativo la defensa insoslayable de los recursos naturales renovables y no renovables. La explotación de los recursos de una manera racional y equilibrada puede permitir un nivel de vida mejor para los ciudadanos, si se lo realiza en el marco de una política de desarrollo armónico y sustentable.

En el país una vez que se estableció un modelo de libre mercado los procesos de producción fueron transferidos a la iniciativa privada nacional, pero fundamentalmente a la iniciativa privada internacional.

Durante el gobierno del Sr. Gonzalo Sánchez de Lozada, (1993 - 1997) se implemento un proceso de capitalización que supuso transferir la administración de las empresas estratégicas del país a la iniciativa privada, fue el caso de ENTEL, YPFB, ENDE, FERROCARRILES, y finalmente al sector Minero Metalúrgico

A efecto de ejercer un control respecto al funcionamiento de estas empresas que precautelan el interés nacional se creó la superintendencia del sistema de Regulación Sectorial (SIRESE) de la cual dependen las superintendencias de Transporte y Comunicaciones, de Energía e Hidrocarburos, de electricidad y otras más.

Sin embargo que estas instituciones fueron creadas con la finalidad de fiscalizar y ejercer un control permanente en las operaciones de las mismas, y dotados de presupuestos importantes para su funcionamiento el resultado final fue frustrante.

Otro aspecto fundamental, fue que las regiones y la propia sociedad civil manifestaron una postura legitima de reclamar por sus demandas históricas y coyunturales insatisfechas, que hasta el momento actual hacen a la crisis que aún persiste en el país, sin vislumbrarse un futuro mejor que haga a la resolución de los problemas, y que a cambio del desencuentro actual del Estado y la sociedad civil y los intermediarios (senadores y diputados Nacionales) pudiera haber un pueblo unido con las instituciones remozadas y eficientes al servicio de la sociedad.

En nuestro país donde la corrupción campea donde se mire, donde la marginalidad y la exclusión a tomado carta de ciudadanía, donde las instituciones que tienen que defender nuestra dignidad y los intereses del pueblo boliviano hacen lo contrario, donde la pobreza y la vida indigna cada vez se profundiza, entonces hay necesidad de dotarnos de mecanismos institucionales reales, así como de mecanismos de control social permanentes, por la que se establece la necesidad de crear en cada una de las regiones del país, en el marco de la Ley de Organización de Poder Ejecutivo (LOPE) particularmente en las prefecturas, las direcciones necesarias que estén en correspondencia con la más importante de sus vocaciones productivas que pueden hacer a su desarrollo

En mi condición de diputado Nacional (1997 - 2005) eso decía el año 2004. la situación del país con el advenimiento del Presidente Juan Evo Morales Ayma, ha cambiado sustancialmente y día que pasa se van resolviendo las grandes necesidades del pueblo Boliviano. Yo diría que hoy por hoy tenemos una nueva Bolivia digna, soberana, inclusiva, participativa con grandes posibilidades de convertirse en uno de los países más prósperos de América Latina. Sin embargo de lo anotado hay necesidad de tener mecanismos de control y fiscalización más eficientes para evitar que la corrupción sea una lacra que pueda frenar nuestro desarrollo.

*Ingeniero Metalúrgico – ex parlamentario

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