Fe por la Virgen del Socavón reunió armónicamente lo divino con lo terrenal

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La belleza de las danzas, su versatilidad, la espectacularidad de los disfraces, trabajo artístico de bordadores y careteros, el garbo además de la simpatía de varones y damas, respectivamente, pero sobre todas las cosas y fundamentalmente la fe por la Mamita del Socavón, juntaron armónicamente lo divino con lo terrenal.

Horas antes, la ciudad se confundía entre la gente oriunda y los visitantes del interior y exterior del país, en busca de asientos para disfrutar la espectacularidad hecha danza, la avenida 6 de Agosto o del Folklore, era el epicentro de un maremágnum que luego se movía por el recorrido de la ruta del Carnaval.

Mientras tanto, los danzarines, afligidos por la tardanza de la entrega de sus disfraces, ultimando detalles o simplemente con muchos nervios por la implicancia de esta añorada fiesta.

Los primeros rayos del sol anunciaban tímidamente que el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad y sus danzarines, devotos de la Mamita del Socavón, iniciarían su extenso recorrido de aproximadamente 4 kilómetros por la calles de la ciudad de Oruro, Capital del Folklore de Bolivia.

Se escuchaban a lo lejos como sonidos que se habrían escapado de la imaginación prolífica de J’acha Flores, la afinación de algunos instrumentos de diestros músicos, matracas, espuelas, silbatos y cascabeles de los danzarines que pululaban impacientes por el recorrido y el punto de inicio.

El gran día había llegado, el momento de iniciar el periplo acentuaba la ritualidad de esta magnífica expresión, en el punto de partida comenzaba la peregrinación con unos minutos de retraso, de lo que se había planificado, es decir las 07:00, pues se convocó a la Gran Tradicional Auténtica “Diablada Oruro” a las 06:00 de la mañana.

Los elementos que hacen única a esta fiesta se vieron reflejados en el acto de fe y devoción a la Mamita del Socavón que fue llevada en hombros por la cofradía de la Asociación de Conjuntos del Folklore Oruro, seguidos por miembros de alta, media y baja jerarquía del Santuario del Socavón y de la Diócesis.

Lamentablemente, autoridades prefecturales y municipales, no iniciaron la Peregrinación, dieron alcance raudamente al recorrido, en otras arterias de la ciudad.

Luego, los “Mañasos”, centenarios diablos irrumpían junto a jinetes infernales montados en elegantes caballos, que parecieran acompañar al ritmo de la diablada con sus pulidas pezuñas.

En la Plaza de Armas, representantes del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS), exceptuando la presencia del presidente Evo Morales, de la Prefectura y delegaciones diplomáticas se aprestaban a disfrutar de tan singular acontecimiento.

Como ocurre año tras año hasta media mañana, el transcurrir de los conjuntos se torna continuo, pero con el pasar del tiempo los famosos “baches” se repiten al interior de bloques de las mismas instituciones y a nivel macro de conjunto a conjunto.

A pesar del trabajo realizado el pasado domingo (último Convite), mediante 60 brigadistas de la ACFO, divididos en dos turnos, los doce puestos de control y los tres tarjeteros ubicados en la Pagador y Aroma, el segundo en la Murguía y Pagador y el tercero en la Avenida Cívica Sanjinez Vincenti, para obtener datos del desplazamiento de los danzarines, no se pudo evitar el desfase.

Otro detalle que se pudo evidenciar es que en relación al pasado domingo, los pasacalles del principal auspiciador del Carnaval denotaban una significante reducción de publicidad (50%), según el convenio firmado entre la ACFO y la Cervecería, sin embargo ayer nuevamente se advirtió grandes pasacalles y publicidad por doquier.

En diferentes puntos de la ruta de Peregrinación, miles de turistas trataban de emular la coreografía de las 18 especialidades de danza (en especial en horario nocturno), claro que los turistas caucásicos con mayor dificultad que los latinos.

Entre tanto, el culmen de la festividad, el Santuario del Socavón era bañando de multitudes policromáticas y sones de las características danzas del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.

El trabajo sacrificado de los guardianes del Santuario, acompañados por el efectivo trabajo de la policía, que flanquearon la plaza y el atrio de la infraestructura religiosa, se prolongó hasta las primeras horas de hoy domingo de Carnaval, labor que será recompensada por la Virgen de la Candelaria, que recibe postrados a sus devotos.

Para esta ocasión se mezclaron dos actividades, la peregrinación del sábado, que se extendió hasta el domingo con el Alba, hecho que al parecer es irreversible.

El sábado de Peregrinación en honor a la Patrona de los mineros, junto a su espectacularidad en disfraces, su extraordinaria coreografía y su contenido único, pasó de forma efímera, como todo lo bueno en la vida, lo que nos espera ahora, es evaluar la fiesta y emprender el trabajo de organización del próximo Antruejo de los Andes, maravillosa expresión del sincretismo andino boliviano.

Fuente: LA PATRIA