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Domingo 16 de marzo de 2014

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Domingo 16 de marzo de 2014
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Estudios
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Inspiración
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Luis Urquieta Molleda
Alfonso Gamarra Un hombre y una obra imperecedera
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Desde mi rincón - ‘Todavía las veréis mayores’, dice el refrán; pero hay no pocos consumidores de las movidas mundiales: cogidos en sus redes, ni siquiera son capaces de percibir de qué va la jugada. Peor: no ven jugada, sino honestísimos esfuerzos por ‘mejorar a los demás’. Y creo que las reflexiones algo indignadas del laico Miró pueden abrir los ojos a aquel tipo de consumidores. Por esto le cedo gustosísimamente mi espacio; pero en la base de todo, porque, junto con muchos otros, firmo de la primera a la última letra lo que ha escrito. Texto aparecido en el periódico digital FORUM LIBERTAS (7.2.14). De paso, quien se pasee por la red quedará enterrado bajo el alud de puntualizaciones a la malévola Comisión de la ONU. Dos ejemplos: el portavoz de los obispos españoles ha advertido de la aparición de una ‘inquisición laica’ con unos dogmas “ideológicos” establecidos al amparo de Naciones Unidas como “universales para todo el mundo”. Y el arzobispo de Lima, les ha devuelto la pelota: “Señores, ustedes en su plan de acción promueven el aborto, que es el asesinato del más débil, el que está en el vientre de su madre. Usted, como institución, en su programa de educación y promoción de la mujer tiene el asesinar a los niños con 20 excusas, me gustaría que me explique. El cinismo que se está apoderando de la agenda mundial es inmenso”. Claro que esto a los ‘activistas’ les tiene sin cuidado: ellos van a otra cosa. (TAMBOR VARGAS)
¿La ONU?, no, un comité de “expertos”: Un nuevo e injustificado ataque contra la iglesia
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Ingreso de Humberto Vázquez Machicado a la Academia Boliviana de la Lengua
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Mi hombre
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Alfonso Gamarra
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Mi amistad con las letras italianas
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“Nuestro mal en Bolivia es que la gente no lee”
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Rubén Darío
Pág 10 
El gato que ladra
Los cholos carnales de Raúl Lara
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EL MÚSICO QUE LLEVAMOS DENTRO
Ser músico en Bolivia
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Cultural El Duende

Desde mi rincón - ‘Todavía las veréis mayores’, dice el refrán; pero hay no pocos consumidores de las movidas mundiales: cogidos en sus redes, ni siquiera son capaces de percibir de qué va la jugada. Peor: no ven jugada, sino honestísimos esfuerzos por ‘mejorar a los demás’. Y creo que las reflexiones algo indignadas del laico Miró pueden abrir los ojos a aquel tipo de consumidores. Por esto le cedo gustosísimamente mi espacio; pero en la base de todo, porque, junto con muchos otros, firmo de la primera a la última letra lo que ha escrito. Texto aparecido en el periódico digital FORUM LIBERTAS (7.2.14). De paso, quien se pasee por la red quedará enterrado bajo el alud de puntualizaciones a la malévola Comisión de la ONU. Dos ejemplos: el portavoz de los obispos españoles ha advertido de la aparición de una ‘inquisición laica’ con unos dogmas “ideológicos” establecidos al amparo de Naciones Unidas como “universales para todo el mundo”. Y el arzobispo de Lima, les ha devuelto la pelota: “Señores, ustedes en su plan de acción promueven el aborto, que es el asesinato del más débil, el que está en el vientre de su madre. Usted, como institución, en su programa de educación y promoción de la mujer tiene el asesinar a los niños con 20 excusas, me gustaría que me explique. El cinismo que se está apoderando de la agenda mundial es inmenso”. Claro que esto a los ‘activistas’ les tiene sin cuidado: ellos van a otra cosa. (TAMBOR VARGAS)

¿La ONU?, no, un comité de “expertos”: Un nuevo e injustificado ataque contra la iglesia

16 mar 2014

Fuente: LA PATRIA

JOSEP MIRÓ I ARDÈVOL

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Hay que preguntarse por los motivos reales del porqué un comité de “expertos” de la ONU formula un juicio tan injusto contra la Iglesia aduciendo la pederastia, a pesar de ser sabedores que es la única institución que ha actuado contra esta lacra

Primero de todo, la ONU no ha dicho nada a la Iglesia ni sobre la pederastia ni en relación a cualquier otro tema. Lo que sí ha habido es el informe de uno de los diversos comités de expertos que sólo se representan a sí mismos, el Comité de Naciones Unidas para los Derechos de la Infancia, produciendo un duro texto contra la Iglesia, que no está sólo motivado por aquella lacra, sino que mezcla otras cuestiones clave que nada tienen que ver con las tareas del comité, como el aborto y el matrimonio homosexual. Esto permite entrever por dónde van los tiros, nunca mejor dicho.

En alguna ocasión he criticado, por razones que nada tienen que ver con este tema, la enmarañada trama de funcionarios “expertos”, comisiones y comités de la ONU, que sin representar a nadie más que a sí mismos pretenden establecer criterios y formular juicios estrictamente ideológicos. La práctica generalizada es que, para bien y para mal, casi nada de toda esa multitud de documentos es atendido ni tan solo conocido, pero a pesar de esta poca relevancia el problema está ahí, porque se ha desarrollado un “sotogoberno” que con facilidad sirve a grandes lobbies internacionales de intereses económicos, y también ideológicos. Uno de los más poderosos es el que amalgama la ideología de género y el homosexualismo político. Un trabajo de años estratégicamente bien construido y muchos medios privados (y a partir de un momento determinado también públicos, dirigidos a estas entidades), obtienen desde hace tiempo grandes resultados, no solo en la ONU, sino en los organismos de la UE. El objeto principal de esta acción es la Iglesia católica, porque es la única Institución de alcance universal que discrepa de su agenda condensada en los Principios de Yogyakarta.

Bajo estas premisas puede entenderse mejor cómo es posible que una instancia de trabajo de la ONU lance en un gesto inédito un escrito tan virulento en su parcialidad. La pregunta es ésta: ¿por qué ahora? Hace pocas semanas que el representante de la Santa Sede en Naciones Unidas dio cuenta de todas las medidas adoptadas por la Iglesia: desde la reparación moral, pidiendo perdón público a las víctimas, hasta importantes indemnizaciones que han llevado a la quiebra a diversas diócesis de Estados Unidos; modificaciones en el Derecho Canónico; establecimiento de obligaciones claras para obispos y sacerdotes de denunciar a la justicia cualquier acto de pederastia, y un largo etc. En realidad, la Iglesia es la única Institución, estatal e internacional, sectorial o corporativa, que se ha enfrentado decididamente contra esta lacra.

Pero, nada de lo dicho ha sido recogido por la ONU y el informe se expresa como si nada se hubiera hecho ni comunicado. Es explícitamente arbitrario y escandalosamente injusto. Por eso la pregunta sobre el momento es tan pertinente. ¿Por qué ahora, cuando con el Papa Francisco ha despertado una oleada mundial de interés, respeto y simpatía, y es un tema sobre el que se actúa reparando y previendo? ¿Por qué el Comité no recoge toda la sistemática aplicada por la Santa Sede en estos años?

Porque al mismo tiempo hay que constatar la indiferencia absoluta de estos expertos ante las denuncias de los casos de violaciones sistemáticas de mujeres y niñas por las tropas de la ONU. De manera reiterada en los países africanos, y en la propia Europa, en sus intervenciones en los Balcanes, donde se han denunciado verdaderas redes mafiosas dentro de los efectivos de Naciones Unidad para traficar y abusar de mujeres y menores. No estoy contando nada nuevo ni realmente desconocido, los medios de comunicación se han hecho eco de ello en su momento, aunque la noticia –a diferencia de lo que sucede con la Iglesia– es fugaz, y desaparece de la memoria. Ni la ONU, directamente concernida, ni los Estados miembros afectados, han hecho nada, ni han adoptado medidas, indemnizado, establecido protocolos para el futuro, nada. Es más, para ellos tales hechos formalmente no han existido. Y ahora tienen la desvergüenza de cargar contra el único sujeto institucional que realmente se ocupa del tema.

Existen estados miembros de la ONU que son conocidos por el turismo sexual y las facilidades para desarrollar relaciones homosexuales con menores, usado como un foco de atractivo turístico. Esto es algo público y notorio, como lo acreditan las agencias de viajes que se dedican a ello en Europa y Estados Unidos. Existen estados donde se combina la poligamia con el matrimonio forzoso con menores. Todos ellos son miembros de Naciones Unidas, pero el Comité nunca ha abierto una información o emitido un juicio.

Pero si se lee el informe pronto se constata un hecho: se aprovecha un suceso pasado, sobre el que se ha actuado y se actúa, para lanzar un verdadero ataque doctrinal. La comisión exige que la Iglesia cambie su posición moral sobre el aborto y el matrimonio homosexual. Se erige en “Autoridad Universal” para dictaminar el bien y el mal, lo cual es aberrante, si no fuera peligroso por el juego combinado con los medios de comunicación y el laicismo de la exclusión religiosa. Es el intento de controlar y dañar al único sujeto histórico que existe que se opone a la ideología de género y su pareja económica, el liberalismo financiero.

Fuente: LA PATRIA
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