Martes 11 de marzo de 2014
ver hoy
Desde tiempos inmemoriales, la muerte ha sido considerada como sinónimo de dolor y luto y cuando nos toca la puerta no tiene compasión y nunca lo hace con sigilo.
Hoy les tocó el turno a nuestros hermanos de la banda Poopó, quienes a pesar de su dolor se vieron obligados a cumplir con los compromisos asumidos para que la fastuosa entrada del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, no pierda su brillo ante los ojos del mundo, ya que no solo representa a un departamento, sino más bien a toda Bolivia.
La desacertada caricatura publicada en un periódico de circulación nacional el día jueves 6 de marzo del presente, ofende a todo un pueblo, por no decir a todo un país y por lo tanto como orureña manifiesto mi indignación ante semejante afrenta, que ha producido miles de sentimientos entre todos aquellos que aparte de valorar nuestro folklore, valoramos también la vida.
No es posible, que imágenes como esa se publiquen sin ningún control en un periódico que desde 1990 ha sido un referente como defensor de los derechos humanos.