Loading...
Invitado


Sábado 25 de enero de 2014

Portada Principal
Revista Tu Espacio

El psicólogo responde

25 ene 2014

Fuente: LA PATRIA

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Licenciada:

Tengo 37 años, desde que mi hijo nació he tratado de darle sólo lo mejor y me esfuerzo mucho trabajando para que sea así. Pero muchas personas me dicen que no es lo correcto. A mí me cuesta mucho porque no tengo un marido y cada vez las exigencias son mayores. Mi hijo ahora tiene 17 años y está acostumbrado a tener lo que pida y me daría mucha pena que las cosas cambien. Él no es un mal alumno, pero tampoco es sobresaliente. De hecho estoy pensando regalarle un auto para cuando salga bachiller. ¿Estoy procediendo bien?

--------------------------

Querida amiga:

El hecho de que toda tu vida de madre hayas tratado de darle lo mejor a tu hijo, no significa que después de todo, él resulte siendo un buen hijo o que sea un alumno sobresaliente.

Lo importante es que tú desde un principio debiste haber establecido la diferencia entre afecto y recompensa material. Son dos cosas totalmente diferentes. Muchos padres suelen caer en este grave error. El padre o madre que diga que quiere a sus hijos y que por eso les regala todo cuanto esté a su alcance e incluso un auto, no está siendo realista.

Puede ser que desde hace mucho tiempo atrás se trataba de encubrir la poca o mala autoestima que tenían los padres consigo mismos.

Si tú tienes una autoestima sana y equilibrada, podrás transmitir a tu hijo esa seguridad y no recurrirás a mecanismos de compensación para tapar tus falencias, carencias o errores.

Comienza por tratar de inculcar esa autoestima en tu hijo, siendo asertiva. Podrás cambiar el mal hábito de premiarle o darle lo que él te pida cada que se le ocurra. Será difícil al principio, pero no imposible.

A la edad que tiene ahora, es conveniente que él se dé cuenta que a veces en la vida, no puede obtener todo lo que se quiere. Que no todo es tan fácil como pedir y recibir.

Podrás ayudarlo a ser más tolerante ante un fracaso o pérdida. Te sugiero que no le regales el auto, ni ningún obsequio especial, si no alcanza metas demasiado exigentes.

Él tiene que esforzarse más para conseguir sus objetivos y sus metas. En otras palabras, tiene que costarle mucho para ganárselo, para que lo sienta como un premio por sus logros y para que lo aprecie, pero también tiene que estar muy consciente de cuánto te cuesta a ti brindarle lo que le das, a nivel afectivo y a nivel material.

No desaproveches la oportunidad, ésta es la etapa en la que tu hijo está a un paso de ser adulto. Si no lo puedes manejar sola, recurre a un psicólogo, con ayuda de un profesional podrás ayudarle a que sea un triunfador y no un mediocre.

Lic. Carolina I. Mena Medina

Consultorio: “La Casa está linda”

Direcciòn: Sucre N. 886 esq. Washington

Telf.: 52-51326 .

psico_menaan@hotmail.com

Fuente: LA PATRIA
Para tus amigos: