Conductor ebrio mordió a policía

Un conductor en completo estado de ebriedad mordió la madrugada del lunes 13 de enero a un efectivo policial, quien cumplía su servicio en la tranca de Vichuloma. El conductor fue aprehendido, el motorizado secuestrado y el uniformado conducido a un centro médico para su atención.

Fuentes policiales informaron ayer que a las 02:30 horas del lunes reciente, personal del puesto de control técnico de Vichuloma, dependiente de la Policía Caminera atendió un caso tipificado como conducción peligrosa, que ocurrió en la carretera Oruro-Potosí por inmediaciones al puesto de control de Vichuloma.

Según versión del cabo Hilarión Choque, refiere que en circunstancias en que cumplía su servicio, observó un vehículo que estaba evadiendo el puesto de control. Motivo por el cual el motorizado fue interceptado por el funcionario, llegando a identificar al conducto como Iver Alejandro Mamani, quien se encontraba en evidente estado de ebriedad.

Posteriormente, el policía herido fue conducido a un centro médico.

El ciudadano ebrio conducía una vagoneta blanca, marca Nissan sin placas, no presentó su licencia y a la prueba de alcohotest dio como resultado 1.53 de grado alcohólico. El caso fue derivado al Ministerio Público por conducción peligrosa y por colocar en riesgo la seguridad de conductores y pasajeros.

CASO

Otro caso de agresión a funcionarios policiales, ocurrió también el lunes 13 de enero a las 20:45 horas aproximadamente, cuando el personal de servicio de la Dirección Departamental de Tránsito hacía el control de las diferentes arterias de la ciudad, específicamente en las calles Brasil y Junín.

Allí intervino la suboficial segunda Alicia Montalvo, quien detuvo a un conductor en estado de ebriedad, identificado como René Bejarano Nina de 41 años. Al ser interceptado por funcionarios policiales, reaccionó junto a otras dos ocupantes, de sexo femenino, agredieron física y verbalmente a la uniformada.

Se tuvo que pedir refuerzo policial para conducir a los agresores a dependencias de Tránsito. El conductor fue remitido al Ministerio Público con el cargo de conducción peligrosa, ya que el test de alcoholemia que se le practicó, dio como resultado 3.67 por ciento de grado alcohólico.

Mientras que las dos agresoras fueron derivadas a la Unidad de Conciliación Ciudadana por “faltamiento a la autoridad”.

Fuente: LA PATRIA