Ozkar: Su pasión por la música es innata

Sin mucho preámbulo, conozcamos a otro de nuestros artistas orureños, Ozkar que lleva la música muy dentro, y como parte importantísima de su vida.

Tu espacio (TE): ¿Cuándo comenzaste a incursionar en la música?

De la misma forma en la que empiezas a respirar cuando llegas a este mundo.

TE: ¿Tu aptitud para la misma se manifestó desde niño?

Desde niño tuve la suerte de escuchar buena música en casa, siempre estaba en el tocadiscos alguna canción de “The Beatles” o de “Santana”.

Considero que más que ver con una “aptitud”, tiene que ver mucho con las opciones que uno elige, más que con una aptitud se trata de una elección que uno hace hacia una u otra actividad, y que a partir de ahí se va construyendo.

TE: ¿Qué instrumentos tocas y por qué?

La compañera fiel que siempre esta al lado cuando la necesito, es mi guitarra. Aunque también me cuelgo el bajo cuando hace falta, es un instrumento alucinante.

TE: ¿Integras algún grupo actualmente?

TE: ¿Qué grupos integraste antes?

La primera banda en el colegio se llamó Kruzifixion, esta etapa correspondía a la rebeldía adolescente y la pasión por el heavy metal, hacíamos más que todo covers de Sepultura y de Metallica (en sus buenos tiempos). Otra banda que recuerdo fue Trash Mental, con Limberth y Carlitos, tocamos bastante con esta banda en los cafés de Oruro, en el Brujas y el In Media Res, lugares que eran el punto de encuentro de la cultura en ese tiempo. Luego tuvimos una banda denominada K-OZ (muy anterior a la banda cruceña del mismo nombre), en ese tiempo ya sonaba Nirvana y la onda Grunge. Posteriormente al conocer a Marcelo, formamos el grupo “Los Socios del Desierto”, básicamente hacíamos covers de Sui Generis. Sin embargo, una etapa más madura en nuestra música fue cuando formamos el grupo “La Oruga”, junto a Marcelo y un batero muy bueno, Rafael. Y digo más madura porque empezamos a tocar nuestras propias canciones, antes teníamos también “compos” pero como que aparecían tímidamente entre un montón de covers. En esta época, con “La Oruga”, nos animamos a componer seriamente y bueno es ahora parte de un proceso que continúa hasta ahora.

TE: ¿Quién te impulsó en este arte de la música?

El Universo, El Todo.

TE: ¿Estuviste en algún instituto o escuela de música o cómo aprendiste a tocar los instrumentos?

El aprendizaje es constante, no es algo acabado, con esto quiero decir que seguimos aprendiendo, siempre hay algo nuevo, y también cada etapa de la vida con sus experiencias respectivas hace que tu música, la forma de componer y la forma de tocar las canciones, vayan fluyendo y transformándose todo el tiempo.

Considero a mi música más artesanal.

TE: ¿Con qué clase de música iniciaste tu carrera y qué clase música te gusta?

Creo que algo que me impulsó a agarrar una guitarra y a sacarle sus primeras notas, fue el haber escuchado por primera vez el riff de la canción de Deep Purple, “Smoke on the water”. En ese momento me cautivó el sonido duro del metal. El riff de esta guitarra fue uno de los primeros que empecé a tocar.

El Metal constituye parte fundamental de mis raíces y gustos musicales, sin embargo escucho todo tipo de música, pero me gusta la música que tenga esencia, y que no sea simplemente una excusa comercial.

No considero a la música tanto así como una carrera, sino que es una parte de mi vida, algo que constituye mi ser.

TE: ¿Algún artista que admires y por qué?

La manifestación del arte es parte inherente de todo ser humano, admirar toda manifestación artística que nos haga comprender que no somos únicamente materia, sino que también vuelo en el espíritu.

El hacer arte es una buena forma de decirle al sistema que no somos máquinas del consumo. El hacer arte es una forma de conectarse con la esencia de nuestras almas y en realidad es que la misma vida debe transformarse en una obra artística permanente. Casi como una representación fílmica de nuestro paso por este planeta.

TE: ¿Cuáles son tus proyecciones?

Bueno, creo que todo es parte de procesos y de etapas, hubo un tiempo de hacer bastante música en cafés, lo que nos ha servido como un entrenamiento, después hubo un tiempo de retiro en el que fuimos componiendo canciones ya más personales, y un paso lógico que quisiéramos seguir es el de grabar estas composiciones para poder así compartirlas. Y aprovechando las formas de transmisión de este tiempo, realizar videos de las canciones, lo que representaría ya otra forma de arte, que es el audiovisual, una forma más de expansión de otra pasión nuestra y también vehículo de expresión artística.

TE: ¿Qué mensaje le puedes dar a la juventud como artista?

Para empezar que todos somos artistas.

Bueno, personalmente decirles que los mensajes están en todas partes. Un amanecer es un mensaje de un nuevo día, un mensaje puede ser un obstáculo para vencer, hay mensajes en las estrellas, en la mirada de un niño, están por donde tú vayas y por dónde mires, lo importante es estar atentos a estos mensajes, para no perdernos esta oportunidad de vivir. Cómo dice John Lennon en una de esas canciones: “La vida es aquello que nos pasa, mientras estamos ocupados haciendo otra cosa”. Y en este tiempo hay mucha distracción y contradicción, me refiero a que las personas están muy ocupadas en lo externo, en el acumular, en el poseer. En este sistema se valora a las personas por lo que tienen o por cómo lucen, y no por lo que realmente son.

A los jóvenes de cualquier edad, decirles que es importante desarrollar muchas capacidades, una de ellas y qué funciona como una herramienta alucinante es la lectura, porque únicamente leyendo seremos capaces de tener diferentes visiones de la realidad y del mundo. Digo esto porque en este tiempo la forma de ver la realidad del ser humano esta siendo construida desde un aparatito cuadrado que todos tenemos en casa, y que nos dice qué pensar, qué comer, cómo actuar y cómo vivir.

Fuente: LA PATRIA