Increíble demora en proceso de contratación de tramo carretero
14 nov 2013
Fuente: LA PATRIA
Recientemente una reunión de carácter internacional, recomendó la urgente conclusión de obras en lo que representa la carretera bioceánica entre Oruro y Pisiga, para acceder, vía Iquique, al océano Pacífico, facilitando también en parte de su tramo la conexión con el Puerto de Arica, lo que hace viable el proyecto de unir por vía terrestre el transporte que se origine en un puerto del océano Atlántico, en Brasil y permita un alto tráfico de exportaciones e importaciones a través del territorio nacional y buena parte por la jurisdicción orureña.
Sin embargo de haberse expuesto, ante autoridades, parlamentarios, dirigentes del sector empresarial y de otras organizaciones sociales, la importancia que en el caso de Oruro reviste contar con su carretera interoceánica en óptimas condiciones, un informe de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), revela que la construcción del tramo II de la vía Toledo – Ancaravi, que además será el último en habilitarse entre la ciudad de Oruro y el puesto fronterizo de Pisiga, continúa en proceso de contratación.
Es increíble lo que sucede con esa carretera y con el corto tramo, algo mayor de 55 kilómetros, que cuenta con un presupuesto otorgado por la Corporación Andina de Fomento (CAF) y consistente en casi 170 millones de bolivianos que finalmente no se utilizan debidamente para impulsar con carácter de urgencia los trabajos del tramo faltante en esa extensión.
Un primer tramo de algo más de 14 kilómetros entre Toledo y Kulluri se encuentra en construcción y podría ser concluido hasta julio del año venidero, el segundo tramo que consta de 41,2 kilómetros de largo entre Kulluri y Ancaravi, que sería el de unión de toda la carretera hacia Pisiga está todavía en proceso de contratación y su inversión está calculada en 126 millones de bolivianos, un monto menor para un tramo más largo que el primero que está avanzando lentamente.
Si se habla de la prolongada espera para contar con una carretera bioceánica, el tema retrocede medio siglo atrás y es una lástima que aún en el presente con tecnología apropiada, con la mayor parte de financiamiento asegurado y pese a la importancia que reviste su conclusión, ese corto tramo entre Toledo y Ancaravi no pueda concluirse como sería de desear en la perspectiva de los planes de desarrollo regional.
Dada la situación estratégica del tema bioceánico es imperioso que el Gobierno intervenga en ese asunto y disponga con carácter de emergencia medidas que contribuyan a completar con carácter excepcional los trámites de la contratación de una empresa que concluya la obra caminera en su última fase, pero condicionando su ejecución a redoblar esfuerzos para tenerla expedita en una próxima gestión, toda la carretera bioceánica del occidente lista para enlazar los puertos más importantes del Atlántico y el Pacífico.
La ABC tendrá que extremar recursos, priorizando el alcance de la estrategia de integración sub-regional, para fomentar el tránsito internacional de todo tipo de mercadería exportada o importada, entre los dos extremos oceánicos donde funcionan los puertos más activos que se utilizan en toda la región.
Estando Oruro en buena parte de ese plan vial internacional, no es justo que se prolongue por más tiempo un desesperado anhelo de concretar el desarrollo sostenible de la zona occidental de Bolivia, donde Oruro además impulsará como complemento de importancia a ese comercio internacional la instalación de su Puerto Seco, un complejo de servicios especializados acorde a los requerimientos del tiempo actual.
Fuente: LA PATRIA
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