La ciudad de Oruro por su importancia y fluida actividad, desde hace años ostentó varios denominativos como Centro Minero, Puerto Seco de Bolivia, Capital Industrial y Centro Ferroviario, sumándose por su famoso Carnaval, la Declaratoria de la Unesco como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, Oruro Capital Folklórica de Bolivia.
Los choferes de Oruro siempre se han caracterizado por su capacidad y valentía al identificarse plenamente con la defensa de los intereses regionales, sus manifestaciones claras, públicas y contundentes muestran su Unidad y Conciencia de Clase, para afrontar sus problemas y defender sus derechos.
El servicio público de pasajeros en Oruro confronta serios y graves problemas por la indiscriminada creación de líneas sin planificación y menos un estudio técnico responsable, ocasionando caos y anarquía en el servicio y tráfico vehicular, más las tres nacionalizaciones de vehículos “chutos”. No hay autoridad de Tránsito y Municipal que pueda realizar un reordenamiento de los miles de vehículos que circulan en la ciudad de Oruro.
El Parque Automotor del Servicio Público de Pasajeros está clasificado en tres modalidades: Micros, Minibuses y Taxis, mientras que el Servicio de Colectivos hace más de cinco años colapsó. Actualmente, en Oruro, el transporte público está atendido por el Sindicato de Micros y Minibuses (celestes) con 8 líneas de micros, 7 de minibuses y el servicio al balneario de Capachos – Obrajes, institución sindical fundada el 4 de Enero de 1952.
El Sindicato de Minibuses (verdes), cuenta con 22 Líneas, fue fundado el 27 de Junio de 1991; la Cooperativa de Transporte “Oruro” fue fundada el 29 de Noviembre de 1985 con 16 líneas de minis rojos.
Oruro es la única ciudad del país donde se cobran los pasajes más bajos, por lo que los vecinos no pueden exigir buen servicio ni óptimas condiciones de las unidades de trabajo, pues la tarifa actual de Bs. 1.20 no cubre los costos reales de operación y menos la canasta familiar que se ha elevado más o peor que los repuestos e insumos del transporte.
La intensa actividad comercial, la instalación de puestos de venta en las calzadas y aceras ocasionan el perjudicial congestionamiento vehicular; no se respeta el derecho de los peatones a circular por las aceras, tal como se ve en todas las calles del centro y zonas periurbanas, obligando al conductor a recorrer en marcha mínima para evitar accidentes, con pérdida de tiempo y mayor desgaste del motor y carburante.
Por las consideraciones anotadas, me permito puntualizar algunas observaciones, para que las autoridades competentes puedan tomarlas en cuenta:
1).- Mantenimiento permanente de las vías de circulación en el casco central y calles de las zonas alejadas, donde viven mayormente familias de condición humilde y de escasos recursos.
2).- Semaforización en pantallas en las arterias de mayor circulación, incrementar mayor número de efectivos de Tránsito, sobretodo en “horas pico”, regulando el servicio y la seguridad en los centros de trabajo y establecimientos educativos.
3).- Control del comercio informal que al ocupar las aceras obligan a los peatones a usar las calzadas, ocurriendo permanentemente toda clase de accidentes.
Este breve análisis de los problemas del transporte público de pasajeros es suficiente muestra de los conflictos que soportan los choferes orureños.
(*) Director de la Revista Transporte
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