Martes 12 de noviembre de 2013
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Los mayores de 18 años conocemos que las elecciones expresan la voluntad popular y son el mecanismo constitucional de renovación periódica de los Poderes del Estado.
Nadie nos puede negar el derecho de participar a plenitud y con absoluta libertad en la constitución democrática de los Poderes Públicos, velando porque la decisión expresada sea respetada y cumplida plenamente.
Prácticamente estamos a un año para elegir un nuevo Presidente Constitucional y es el momento de reflexionar para no equivocarnos porque Bolivia, precisa con urgencia, reencaminar su destino dentro los lineamientos veraces que establece la democracia.
Con nuestra participación en las urnas demostremos que nuestra Patria no puede seguir siendo objeto de vilipendio con transformaciones o cambios hacia un régimen político no democrático en el que el Ejecutivo, Legislativo y Judicial estén concentrados en un reducido número de personas que subordinan los derechos de los ciudadanos a la determinación de una sola persona.
Habrá que pensar mucho para no desperdiciar el voto, a fin de no continuar en manos de anarquistas que preconizan el materialismo socialista como punto de partida para someter al pueblo dentro de una corriente contraria a todo principio de Libertad y Justicia.
