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Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 La clase media en el infinito de su decisión revolucionaria - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
La clase media en el infinito de su decisión revolucionaria
06 oct 2013
Por: Adhemar Ávalos Ortiz
Hablar de la clase media es referirse a un grupo social incierto en los términos clásicos del marxismo. En vida de Marx y Engels fue considerada como una certidumbre acomodada, a pesar de indicios falsos. Simplemente se acomodó a su época. Se creía, muy equivocadamente, que eran funcionarios pequeños-burgueses acomodados al sistema capitalista. En realidad eran intelectuales de “corbata blanca” que se habían sometido a un sistema de calificación laboral cruel y estaban calificados para el asunto de empleo con plena competencia, la de la rigurosidad técnica.
No obstante, el tiempo nos habla de la tendencia caprichosa de los grupos a adoptar tendencias sociales cómodas, ratificadas en su temporalidad histórica, en su inmediatez que se debe a sus precariedades hegemónicas. Una clase social se debe a su tiempo y no como lo afirmaba Marx que daba a la clase obrera una situación prácticamente permanente en el tiempo, hecho que sería negado por el desarrollo de los acontecimientos. Hoy, la clase obrera es una clase social cómoda que pervive gracias a sus chantajes al sistema capitalista y pseudo-socialista. Tiene privilegios impensables para otras personas como aguinaldo, beneficios sociales, seguros sociales y otras prestaciones.
En cambio, la diluida clase media cae en el fatalismo de su falta de decisión histórica. Se divide en varios grupos heterogéneos, a pesar de que podría reclamar, con toda justificación, su raigambre totalizante. La clase media está constituida por una serie de poderes, desconocidos por la mayor parte de los analistas. Es una realidad dramática y estratégica.
La clase media está constituida por una serie de poderes. El primero es un grupo que protesta de día en día, de manera ciertamente callada. Son los contestatarios de manera refilada, cosa que es contradictoria con su rol en la sociedad, la que teme enfrentarse al sistema totalitario, la que le proscribe sus ideas de cambio teóricas. Trabaja para sí misma en el sistema de consultorías, o en el de los llamados eufemísticamente como actividades de “cuenta propia”. Tiene soluciones al problema del país, pero no las propone, y menos asume, porque tiene un miedo patológico a tomar decisiones políticas, no las del diario decidir.
El segundo sector es la clase media convenenciera, la que se vendió al sistema por necesidades de coyuntura y encuentra fuentes de trabajo. Por diezmos entrega su convicción que quizás nunca la tuvo, actúa por sobrevivir cómodamente. El tercer grupo es amorfo, un sector que carece de identidad que pertenece a la clase media, pero la niega porque vive para subsistir. En realidad no tiene ideas.
En esta integridad de tendencias, la clase media debería asumir su rol, o hundir a Bolivia. La clase obrera está degenerada. Los campesinos están ahítos de poder étnico en su propiedad capitalista de la tierra. Los cocaleros y cooperativistas son reaccionarios. Lo que se necesita es un partido de clase media, que no existe, que le haga determinarse por un rol revolucionario.
*Politólogo
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