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Domingo 06 de octubre de 2013

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Revista Dominical

¡Libres! Testimonio de mujeres víctimas de las dictaduras

06 oct 2013

(Movimiento de Mujeres Libertad) • Dr. Antonio Revollo Fernández

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I. INTRODUCCIÓN.-

La obra intitulada ¡Libres! Testimonio de mujeres víctimas de las dictaduras, editorial Plural, 2da., edición, mayo de 2013 con un tiraje de mil ejemplares, siendo responsables de la misma un grupo de revolucionarias que con paciencia infinita recogieron relatos angustiantes de sus congéneres y narran también sus propias experiencias, heridas aún sangrantes cada vez que las recuerdan:

- Lourdes Koya Cuenca, Carmen Murillo del Castillo, Miriam Rodríguez Sánchez, Elsa Crispín Quiñones y Kivie Murillo Gamarra.

El libro narra 34 testimonios de mujeres víctimas de las atrocidades de los regímenes dictatoriales que vivió Bolivia en las décadas del 60-70 y 80, épocas de las dictaduras del Gral. René Barrientos Ortuño, Gral. Hugo Banzer Suárez y Gral. Luis García Meza, en alianza de grupos retardatarios de derecha, militares y civiles.

II. CONTEXTO HISTÓRICO.-

A partir de las masacres blancas institucionalizadas, amparadas en el ordenamiento jurídico en beneficio de los poderosos, el derecho burgués y reaccionario, el ordenamiento económico – social de estratos sociales privilegiados de la burguesía en detrimento de las clases subalternas soterradas al mísero salario, y el ordenamiento cultural que utilizaba la prensa, la radio, la televisión y el aparato educativo nacional fue para imponer la violencia institucionalizada en el pasado inmediato de las dictaduras fascistas en el país, particularmente en obediencia al famoso Plan Cóndor en América Latina. Pero, las luchas populares en Bolivia han sido una constante en pos del ideal supremo del socialismo, que significó las brutales y despiadadas persecuciones digitadas desde el gobierno a través del “Ministerio del Interior” de dichos gobiernos en contra los “subversivos”, “rojos comunistas” y “ultra - izquierdistas”, dirigidas desde el Pentágono, y ejecutados servilmente por los militares y paramilitares bajo el anzuelo de jugosos estipendios. Los asesinatos, previa tortura, de cientos de los enemigos del régimen cometidos en los antros policiales, carceletas y centros de reclusión, junto al exilio voluntario o forzado de miles de combatientes fue dramático y penoso, particularmente de las mujeres que no bastaría para llamarlas las heroínas de la libertad.

III. ALGUNOS TESTIMONIOS.-

Son 34 testimonios de mujeres víctimas de las dictaduras, todas desgarradoras que laceran el alma y perforan el corazón más duro nos dan un mensaje claro que el estoicismo y sacrificio de toda una generación, que comprometieron la seguridad personal y familiar, que a manera de un resumen de algunas experiencias lacerantes se extrae:

1.- LEDY CATOIRA MORENO.- Oriunda de la ciudad de Santa Cruz, dice con extremada crudeza y propiedad: “Los intereses en común entre el ejército, la burguesía, el Estado, y las transnacionales, en los que primó el salvajismo propio de la época más primitiva”. Era la época de Banzer – Selich, luego de ser arrebatada, atropellada y llevada de un lugar a otro con los ojos vendados, obligada a permanecer en una celda inmunda donde noche anterior fueron masacrados y torturados, amigos y camaradas del E.L.N., en la carceleta de Achocalla, una estación abandonada, resistió de manera estoica hasta el final las vejaciones, humillaciones de los esbirros que torturaban con saña en los largos y permanentes interrogatorios en busca de alguna delación para sus camaradas.

2.- GERALDINE CÓRDOVA PIMENTEL DE CORONADO.- Pese a su edad, llamada la abuela, comprometida con la revolución popular hasta el tuétano, apresada, varias veces, liberada gracias a la presión de instituciones humanitarias del extranjero y del país, apresado su compañero, Benigno Caballero, al enterarse de la posible aplicación de la ley de Fuga, tan común y corriente en esta época oscurantista, “alquila un taxi de La Paz a la ciudad de Sucre, entra al Tribunal el día de la audiencia vestida de pollera, y con el argumento de llevar al baño al preso enfermo, salen por una puerta lateral al taxi comprometido, y allí la escapatoria hasta la ciudad de La Paz, e inmediatamente a la embajada venezolana!.

¡Qué valor!, ¡que audacia!! Que coraje y lealtad de una mujer para su compañero!.

A esta anciana combatiente amiga de Fidel Castro la poeta Adyz M. Capuli de nacionalidad cubana le dedica esta estrofa:

A esa abuelita de corazón grande

A la boliviana que no podemos olvidar

Cuando de libertad se hable…

3.- MIRNA MURILLO.-

El paroxismo próximo a la locura de los esbirros paramilitares, se extrae del relato desgarrador de Mirna Murillo apresada junto a su hermana Kivie y Gary Murillo, médico cirujano. Presa en una oscura celda en la ciudad de La Paz, por “subversiva”, la tortura empieza con rompimiento de los dientes, luego, encajada un trapo en la boca, un lápiz hace trizas el tímpano, fractura de costillas, desviación del cóndilo de la columna, el ojo derecho desviado, quemaduras de cigarro encendido en las manos y senos, colgada de los pies durante largas jornadas en interrogatorios tormentosos con el manido argumento de conocer nombre y direcciones de los denominados “castro – comunistas” por la canalla gobernante de Hugo Banzer Suárez, luego de García Meza-Arce Gómez y sus acólitos nativos. Tanta saña, tanta avidez de sangre de los torturadores, atavismos salvajes de la derecha fascista, que dejaron secuelas imborrables de cientos de familias, particularmente de las revolucionarias.

4.- MIRIAM RODRÍGUEZ

SÁNCHEZ.-

Declarada comunista hasta la muerte, orureña, que siguió los pasos de su padre el profesor licenciado Florencia Rodríguez Carrasco, vio de cerca y sufrió las consecuencias de su militancia, que conoció las carceletas de Achocalla, Isla Coati y Achocalla, acusada de “elena” (Ejército de Liberación Nacional), quien por muchos años no pudo lograr un puesto de trabajo, y si lograba era despedida por sus antecedentes “extremistas”, el delito de pensar era penado con el hambre y la miseria.

A través de Miriam Rodríguez Sánchez, se rescata del olvido algunos nombres de algunas mujeres revolucionarias como: “Doña Bertha Porcel, Clara Torrico, Elsa Burgoa y Teresa Niño de Guzmán de Oruro, Mirna Murillo y la abuela Delfina Burgoa de La Paz; Welly Fernández, Mery Alvarado, Consuelo Quitón, las hermanas Magali y Dora Camacho de Cochabamba la profesora Mira Castillo de Tarija, Ledy Catoira de Santa Cruz…”

5.- ELIA BURGOA MENDIVIL.-

Como muchas de las mujeres perseguidas y presas, también existen dramas conyugales como el de Elia Burgoa Mendivil que con cirugía de la columna, aún con el soporte ortopédico después del encarcelamiento y salir temporalmente con libertad condicional se entera que su familia está destrozada por el divorcio planteado por su esposo.

6.-BERTHA PORCEL DURÁN.-

Leer el testimonio de la meritoria profesora y abogada Bertha Porcel, proporcionado por su hijo Sr. Ludwig Eduardo Arce Porcel, fue fundadora del Instituto de Cultura Social de la UTO, dirigente y autoridad educativa, activa militante de la Federación Democrática de Mujeres de Oruro, y otras instituciones, es apresada en marzo de 1972 en la ciudad de Oruro, junto a Ninoska Liendo y Clara Torrico, trasladadas a las “casas de seguridad” en Alto Sopocachi, Villa Copacabana, Villa Armonía y Achocalla, su férreo temple y firmeza en sus decisiones marcó huella entre las mujeres encarceladas, porque jamás bajo la cerviz y su voz carismática es un ejemplo de templanza. Una chuquisaqueña y dos orureñas que pagaron alto precio sus ideales.

IV.- EPÍLOGO.-

He aquí en ligero bosquejo de esta joya historiográfica testimonial entregada el jueves 28 de septiembre en el Paraninfo Universitario en un programa elaborado conjuntamente con la Casa de la Cultura de la UTO y el Movimiento de Mujeres Libertad.

¡Honor y Gloria para las heroínas de la libertad, gestoras, con su sacrificio, de la primavera democrática, los derechos humanos que vivimos hoy en nuestro país en busca de una sociedad superior sin privilegiados ni desprotegidos!

(*) Texto leído con motivo de la entrega del libro: “¡Libres! Testimonio de mujeres víctimas de las dictaduras

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