Como van las negociaciones entre autoridades del área económica del Gobierno y un sector de los gremiales, que están reconocidos por la COB, los topes para pertenecer al Régimen Tributario Simplificado (RTS) se ampliarán de tal manera que permitirán agrandar los negocios que hasta el presente se limitaban a ciertos sectores del comercio minorista, pero que en adelante pueden ser incorporados a una categoría de un comercio mediano.
Por supuesto que la categoría “mediana” no está consignada en la regulación tributaria que del régimen simplificado pasa directamente al de tipo general en el que contraen obligaciones especiales a partir de la extensión obligatoria de notas fiscales que no es parte de la responsabilidad del Régimen Simplificado.
El reciente convenio suscrito entre el Ministro de Economía en representación del Gobierno y los dirigentes de la Confederación Sindical de Trabajadores Gremiales, Artesanos, Comerciantes Minoristas y Vivanderos de Bolivia permitirá subir los topes vigentes de 12 a 15 mil bolivianos, que en el futuro serán de 37 a 45 mil bolivianos, lo que se traducirá en un decreto supremo.
Sin embargo hay una condición especial impuesta desde el Ministerio de Economía y Finanzas, señalando que los topes planteados entrarán en aplicación una vez que el Padrón Nacional del Régimen Tributario Simplificado registre a 200 mil nuevos contribuyentes. El sector gremial tiene actualmente un registro de algo más de 38 mil comerciantes afiliados al RTS, asegurando que fuera del margen legal existen por lo menos dos millones de personas que se dedican al comercio formal e informal en todo el país, de los cuales se espera que 200 mil puedan pasar a la legalidad tributaria con la nueva alternativa que permitirá declarar un capital mínimo de 37 mil y un tope máximo de 45 mil bolivianos.
Si se analiza la situación desde el punto de vista de la formalidad comercial, por el método acordado de admitir los nuevos topes, un enorme contingente de comerciantes evasores pasarán a cumplir la mínima obligación de pagar un impuesto regular, pero exentos de las declaraciones oficiales, extensión de facturas y presentación de balances, que son obligaciones del Régimen General.
El tema no es aumentar el número de gremiales inscritos en el RTS, lo que se observa en esta materia es que con un capital de 45 mil bolivianos, ya es posible arrancar con un negocio no precisamente minorista, más aún si se admitiera la propuesta de otro sector de gremiales que han rechazado el acuerdo que comentamos y proponen un tope mínimo de 21 mil y un máximo de 69 mil bolivianos, ésta última cifra muy próxima a 10 mil dólares suficiente para instalar un buen puesto de contrabando y mimetizado como comercio minorista.
En todo caso lo que se quiere en materia de impuestos es “universalizar” el régimen tributario y eliminar el mayor porcentaje de evasión institucionalizada que se presenta justamente en el distorsionado régimen simplificado, que por efecto del nuevo acuerdo subirá en sus topes y podría abrir un nuevo desfase entre la legalidad y la informalidad camuflada con el sello gremialista.
Fuente: LA PATRIA
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