Jueves 22 de agosto de 2013
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La señora Alcaldesa y los miembros del Concejo Municipal, saben muy bien que la acera es para los peatones, mientras que los vehículos deben correr por las calles y los comerciantes estar dentro los mercados.
Eso es lo correcto, pero con el tiempo, las arterias se han convertido en centros de atracción comercial, porque quienes se dedican a esa actividad, sin embargo de tener casetas dentro el mercado, copan con sus productos toda la acera y la calzada, contraviniendo normas internacionales.
Avenida que se asfalta, inmediatamente es invadida por comerciantes y en las aceras ocurre lo mismo, haciendo peligroso el trajinar de personas que deben luchar con los vehículos y los puestos de venta para llegar de un lugar a otro.
Nadie pone en duda que la actividad comercial creció en Oruro, pero ello no da lugar a que se peque de incomodidad dando paso a quienes creen tener derecho a ganar plata a costa de la vida de los demás.
Ante esa realidad, la señora Rossío Pimentel como el señor Juan José Ramírez, Presidente del Concejo Municipal, ya tienen que dejar a un lado sus posiciones antagónicas, trabajando sincera y lealmente por esta ínclita ciudad, haciendo realidad la construcción del nuevo Mercado Central.
