En Oruro se ha reclamado de manera insistente, inclusive bajo conminatoria de acciones de protesta, para que el mapa departamental que sigue utilizando el Instituto Nacional de Estadística sea retirado de circulación y por supuesto corregido en la instancia pertinente para evitar perjuicios a muchas poblaciones y de manera general a los intereses del Departamento.
No ha sucedido absolutamente nada, el INE manejó esa carta geográfica y aún lo hace como referente del Censo del 2012 que por supuesto acusa fallas y que sigue manejado en la etapa del último recuento ciudadano, lo que implica mantener un margen de error con calamitosa consecuencia.
El asunto ha sido observado por un asambleísta que mostró preocupación por la manera irresponsable que trabaja el INE que no cumplió su compromiso de noviembre pasado para retirar el mapa irregular que ocasiona un ilegal traslado de algunas poblaciones a jurisdicción de Potosí y La Paz. Este gravísimo error es un flagrante atentado al interés de Oruro y no puede pasar desapercibido sin que se apliquen sanciones a funcionarios culpables de una clara omisión.
Lo que se denuncia es sólo parte del problema, pues este hecho que se arrastra de hace varios años tiene otras connotaciones particulares, como la constante incursión de pobladores del norte potosino a la zona colindante de Oruro. Varios hechos, los más con características violentas, han movilizado a prefectos de los dos departamentos, también participaron ministros de Estado y pese a las recomendaciones de pacificar la zona y aceptar la delimitación que corresponde al Instituto Geográfico Militar, IGM, simple y llanamente no se han cumplido esos propósitos y Oruro sigue con un mapa distorsionado.
Una información actual señala que el IGM presentó recientemente lo que considera el primer mapa vial y turístico de Bolivia, un trabajo que incluye una serie de datos sobre el sistema caminero, puntos de áreas protegidas, sitios de atracción turística, estaciones de servicio y otros elementos interesantes que incluidos en la tal carta geográfica facilitará a nacionales y extranjeros su desplazamiento por el territorio boliviano.
Pero… hay un pero cuestionable y es que al ser el IGM dependiente del Ejército Boliviano la única entidad reconocida oficialmente por los órganos cartográficos internacionales como la institución rectora para realizar mapas, cómo es posible que no haya realizado un trabajo definitivo en una parte de la geografía departamental en los límites de Oruro con La Paz y Potosí para regularizar el error permanente que inclusive permite que el INE siga usando un mapa distorsionado de Oruro, que entre otras cosas tiene muchos elementos que seguramente están incluidos en función del interés turístico que reviste un nuevo mapa de Bolivia.
El señalado mapa turístico del país ha sido puesto a la venta recientemente por el IGM, pero seguramente algunos ejemplares llegarán a las gobernaciones y los municipios para fines de promoción. Hay necesidad de examinar tan importante documento para establecer cómo ha definido el organismo cartográfico nacional el mapa que establece la jurisdicción orureña. De haberse corregido el error, que afecta a Oruro, ese documento debe ser la base para definir nuestra carta geográfica, si no ha sucedido tal cosa el asunto es sumamente delicado y corresponderá a nuestras autoridades adoptar las medidas que correspondan en defensa de los intereses departamentales.
El primer mapa vial y turístico de Bolivia, elaborado por el IGM, debe ser una garantía en la aplicación de sus servicios específicos.
Fuente: LA PATRIA
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