Lo cierto es que la historia del abastecimiento del GLP resulta grotesca cuando se hace cierto tipo de anuncios y resulta que en la práctica miles de vecinos, quedan defraudados porque el gas se esfuma antes de llegar a los barrios.
Un anuncio de días pasados, cuando nos referimos al mismo tema, daban cuenta de la habilitación de una nueva planta productora del GLP y cuyo volumen de tratamiento llegaría a cubrir la demanda nacional y el excedente serviría inclusive para exportar al Paraguay.
La planta entró en funcionamiento aunque se re conoce que con algunos inconvenientes, sin embargo el mayor de estos es que la producción de GLP no ha satisfecho en lo más mínimo la exigente demanda del combustible en las ciudades del país, esto significa que no se han tomado las previsiones del caso para definir el destino de la producción de este elemento, puede ser también que la cantidad inicial realmente es insuficiente para abastecer el mercado interno, pero lo peor sería que, irresponsablemente se disponga la venta del GLP a un mercado externo desabasteciendo al país.
No hay una explicación coherente sobre este asunto que se torna preocupante, pues cada día las filas en las calles con gran cantidad de garrafas se hacen más largas, las protestas son generalizadas, el sacrificio de las amas de casa es enorme en la búsqueda incesante de algún camión repartidor, tarea nada grata considerando que hay que hacerla trasladando el pesado envase.
Como si fuera tan sencilla la solución, sin entender el enorme perjuicio que se causa a la población, desde la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) en la ciudad, alguien que no entiende el drama de la población, señaló con mucha desfachatez que “la distribución de GLP es irregular porque el producto no abastece”, habrase visto semejante desatino.
Y hay que decirlo con claridad recordando que la autoridad regional de YPFB aseguró tiempo atrás y lo hizo repetidamente señalando que se dispondrá de una mayor cantidad de GLP, justamente para cubrir la sobredemanda que en nuestro medio se presenta en la época de invierno, estación natural que ya está pasando, pero lamentablemente con menos GLP que de costumbre.
Según los vecinos es fácil mencionar cifras sobre los supuestos volúmenes de GLP que se disponen para Oruro, por ejemplo que de una asignación de 1.700.000 kilos, para 7.500 garrafas, ahora se dispone de 2.342.019 kilos para disponer de 8.200 garrafas se entiende para todo el departamento, pero lo que no se aclara es dónde se esfuma el gas que debe ser distribuido por camiones repartidores especialmente en los barrios periféricos, donde el GLP no llega.
Algo está sucediendo y el hecho es que la ANH que de algún modo burocratiza la tarea de regular, fiscalizar y controlar la comercialización de todas las actividades de la cadena de hidrocarburos, por lo que toca a Oruro, su responsabilidad en el abastecimiento de GLP es absolutamente deficiente, esto merece un replanteo en el sistema para que no se agrave la situación de miles de personas que están diariamente pendientes de comprar el GLP y que actualmente deben peregrinar en la ciudad en busca de algún camión distribuidor. El suministro de GLP debe manejarse responsablemente pues se trata de proveer un insumo de primera necesidad para la población.
Fuente: LA PATRIA
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