A principio del mes presente “el pleno de la Asamblea Legislativa Departamental” aprobó algunas leyes, entre esas normativas regionales, dos consideradas realmente importantes, como la construcción del nuevo hospital de tercer nivel y la conclusión del edificio policial en proximidad de la Terminal de Buses, además de otras leyes para promover la actividad cultural y artística en el departamento.
Este tipo de actividades al interior de la Asamblea Departamental son las que con mayor frecuencia debieran darse, en cumplimiento a las atribuciones conferidas a los asambleístas, cuyo trabajo debe dar como resultado el mejoramiento de las condiciones de habitabilidad de nuestra población.
En el caso de salud se anota una serie de deficiencias en los dos centros hospitalarios más importantes (tercer nivel) el Hospital General San Juan de Dios, y el Hospital Obrero dependiente de la Caja de Seguro Social, en ambos casos se reconoce los adelantos que se producen paulatinamente con mejor equipamiento en algunas áreas de atención, pero al mismo tiempo con muy marcadas limitaciones en otras en las que faltan equipos y personal especializado.
El crecimiento poblacional rebasa los límites previsibles de atención en el Hospital General, que pese a una serie de ampliaciones difícilmente puede cubrir las necesidades diarias de la ciudadanía que acude a esos servicios. Lo propio sucede con la seguridad social, que aumentó ostensiblemente el número de asegurados y también son patéticas las limitaciones de atención a sus pacientes.
Por tanto se hace imprescindible la construcción de un nuevo hospital de tercer nivel, que debidamente equipado pueda solucionar el penoso problema de una gran cantidad de personas que actualmente deben esperar largos turnos para recibir atención de salud. Ojalá que la decisión de la Asamblea Legislativa departamental sea persistente en el seguimiento que merece el proyecto de manera que conjuntamente con el Gobierno Municipal y el apoyo estatal pueda concretarse esta obra tan requerida y esperada en nuestra ciudad.
El otro tema, que fue considerado también de prioridad es la conclusión del edificio del Comando Policial ubicado frente a la Terminal de Buses y que por muchos años no avanza de la primera fase de su estructura básica, el esqueleto de la edificación. La Policía necesita comodidad para emplazar sus departamentos especializados, por ejemplo la Operativa de Tránsito y otras que necesitan de adecuada infraestructura para ofrecer un mejor servicio a la comunidad en el marco de las competencias de la Ley de Seguridad Ciudadana. Corresponderá ahora a las autoridades de la Gobernación como a las de la instancia municipal completar los trámites legales para hacer viable el reinicio de las obras, debidamente financiadas y profesionalmente vigiladas hasta su conclusión. De ese modo Tránsito dejará libres los ambientes que usa en los predios colindantes con la exaduana, donde además debe construirse el Mercado Central, que dicho sea de paso debería anotarse también como otra de las prioridades sociales de la ciudad.
De momento los temas de salud y seguridad ciudadana están directamente al amparo de la oportuna resolución de la Asamblea Legislativa Departamental que aprobó leyes especiales de prioridad para beneficio de los orureños. El asunto debe coordinarse entre autoridades para que no queden en simples enunciados.
Fuente: LA PATRIA
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