Miercoles 14 de agosto de 2013
ver hoy
Las noticias se desgranan con gran rapidez. La de hace un instante ya es pasado, y la próxima ya está cruzando por la vereda. Hemos retenido algunas para verlas desde el otro lado de la luna:
Sigue la polvareda del censo. Les resultó una camisa de once varas. No esperaban que ocurriera eso, ¿verdad? Les ha movido el piso como un sismo. Pero el que le ha puesto el toque original es el jefazo. ¿Saben qué ha dicho? “Todos somos originarios; unos son milenarios; otros, contemporáneos”. A esta cuenta, no hay nadie en el mundo que no sea “originario”. Es una novísima especie antropológica descubierta -lo suponemos- por los brujos del Palacio Quemado. Con el mismo tema, el Vice se extravió de gran manera en una difusa maraña retórica que envidiaría -si aún estuviera vivo- el legendario Mario Moreno, más conocido como Cantinflas en su “México lindo y querido”.
Otra “perlita” fue el veto a la visita de Henrique Capriles. ¡Quién hubiera imaginado! Bolivia había sido un feudo político plurinacional! Por el bloqueo del espacio aéreo en Europa se dijo que era una conspiración y una ofensa a los pueblos; tan grave, que por poco no les perdona Evo la vida a los involucrados. Pero aquí vuelan otras moscas, hasta el bloqueo es de uso exclusivo de las masas. Como se sabe, el excandidato representa a la mitad del electorado venezolano y no puede venir a Bolivia; en cambio un ministro iraní, buscado por la Interpol por terrorista, estuvo en varios actos oficiales de invitado especial. “Los enemigos de mi enemigo (EE.UU.) son mis amigos”. La fórmula funciona.