Hallazgo de terror

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Muchas veces observamos películas de terror que hacen traspirar el cuerpo, pero solo es ficción, mientras lo que le tocó vivir a una señora en carne propia el lunes 12 de agosto en la mañana, fue más que suficiente para acordarse toda su vida y espantarse por el espectáculo visto.

Como todos los días salió de una vivienda de la urbanización Santiago, con su rebaño para que pueda comer un poco de pasto que existe por el sector, tras pasar la carretera que une la ciudad de Oruro con La Joya, siguió su paso hacia el Oeste.

Divisó que en la zona había huesos, “estaba botado ahí y yo pensé que era un perro muerto, los alkamaris (aves de rapiña) estaban comiendo, ¿qué cosa será? Y esa fue mi sorpresa, feo me he asustado, al igual que mis guaguas”.

También se convocó al personal de la División Homicidios y de la División Escena del Crimen de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para que se encargue de la investigación, recolección de indicios y pruebas que aporten a esclarecer el caso. Ese trabajo fue apoyado por personal del Ministerio Público, cuyo médico forense se encargó de aportar sus conocimientos para determinar muchas interrogantes acerca del cadáver.

Una vez analizados los huesos en forma visual, fueron recolectados y colocados en una camilla. Ahí se supo que el cuerpo pertenecía a un joven, pero no se podía determinar aún cuál era la causa del fallecimiento o la data de la muerte. Se formularon varias hipótesis que serán ratificadas o descartadas conforme avance la investigación. Asimismo, los efectivos policiales hicieron un barrido para encontrar el brazo y mano derecha de la víctima, que se presume que algún can lo alejó del lugar.

Posteriormente, los restos óseos fueron depositados en la morgue del Cementerio General.

AUTOPSIA

Ayer en la mañana se realizó la autopsia de ley y cuyo informe preliminar fue brindado por el director interino de la Felcc, teniente coronel Roger Zenteno, quien manifestó que la osamenta pertenecería a una persona de sexo masculino comprendido entre 25 a 30 años. Tenía una estatura de un metro con 59 centímetros, presentaba una fractura en el tercio medio, con desmembramiento de mano derecha. El cuerpo presentaba depredación canina, la cabeza no tenía signos de violencia, no se presentaron lesiones violentas. El húmero fue enviado al laboratorio para determinar el ADN.

Según el informe forense el cuerpo tenía una data de siete a diez días y la causa de la muerte era a determinar.

Las autoridades policiales pidieron a la ciudadanía reconocer el cuerpo para darle cristiana sepultura.

Fuente: LA PATRIA