Sábado 15 de junio de 2013
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El pueblo no se equivoca cuando dice que la administración gubernamental de don Evo Morales es mala y contradictoria al interés nacional.
Lo anterior queda demostrado por los propios militantes del Movimiento al Socialismo al criticar la gestión de gobierno. Esa posición de por sí, convalida todo lo peor que hay dentro el partido del Presidente de la República, situación causante de las fallas en el proceso de cambio.
Es encomiable ver como altos personeros del MAS reconocen los errores que cometen en el manejo del Estado, promoviendo la división en la familia boliviana, al estar fomentando la corrupción, engendrar la violencia y otros actos intolerantes que ponen en riesgo el proceso democrático.
Además se puede observar al interior del Movimiento al Socialismo un resquebrajamiento militante, lo cual es un indicio de que no todo es una taza de leche.
Las continuas declaraciones de connotados masistas observando el mal proceder de la gestión gubernamental, seguro estoy, preocupa al entorno palaciego, al ver cómo sus propios seguidores reprochan su labor.
Mucho se dice que el actual Gobierno presidido por don Evo Morales ya no es, o mejor, nunca ha sido la genuina representación de la clase campesina al haberse traicionado sus postulados desde el inicio de su gestión.
