Miercoles 12 de junio de 2013
ver hoy
Editorial y opiniones
Economía de palabras
Profecía autocumplida
12 jun 2013
Por: Humberto Vacaflor Ganam
El decreto que norma el programa “Bolivia cambia, Evo cumple” establece que los recursos que las regiones no llegasen a ejecutar en una gestión, serán revertidos al gobierno central y usados por ese programa.
Sin ser muy creyente que digamos, el gobierno aplica en este caso aquello de “ayúdate que te ayudaré”.
¿Cómo se puede dotar de más recursos a este programa de filantropía que hace el presidente en su propio nombre, como si fuera una fortuna de su familia o sus socios cocaleros?
La solución de las autoridades de Economía es muy imaginativa, aunque poco escrupulosa.
Según Siglo 21, el gobierno ha creado una maraña de vallas y obstáculos que impiden a gobernaciones y municipios tener una tasa de ejecución de sus presupuestos anuales superior a 60%.
De lo que resulta que aproximadamente 40% de los presupuestos de las regiones retorna al gobierno central y va a las arcas del programa del presidente-candidato.
Alfonso Lema, subgobernador de Tarija, relató a la carta informativa semanal que este año él hubiera querido comenzar las licitaciones para ejecutar su presupuesto en enero, es decir en el primer mes del año, como corresponde.