La agenda 2025 una proyección para mejorar la calidad de vida
04 jun 2013
Por: Ricardo Rocha Guzmán
Estudios realizados respecto a la situación de indigencia y derechos de la infancia, demuestran que el “77 por ciento de la población boliviana vive en situación de pobreza”, y revisándolas estadísticas nacionales refieren que Oruro es el departamento más deprimido de Bolivia, sin embargo de que en el último tiempo su crecimiento económico fue significativo.
Evidentemente, Oruro está generando riqueza, pero sus beneficios están siendo expandidos en otros departamentos del país, y la realidad del habitante orureño no es de las mejores porque la extrema pobreza que afecta principalmente a los sectores sociales, no ha sido erradicada.
El nuevo reto
Ante este escenario se hace necesario proponer seriamente estrategias a largo plazo, para encarar un verdadero desarrollo de Oruro, y quizás sea el nuevo reto de los próximos gobiernos departamentales y el de sus propios habitantes.
Hace algunos meses el Gobierno decidió relanzar la propuesta denominada “Agenda 2025” en la que contempla desarrollar una agenda de trece pilares como “metas visibles para que el nivel de vida de la población boliviana mejore”, entre los que se destacan: “la erradicación de la pobreza extrema; la socialización y universalización de los servicios básicos con soberanía para vivir bien; salud, educación y deporte para la formación de un ser humano integral; soberanía comunitaria financiera sin servilismo al capitalismo financiero; soberanía y transparencia en la gestión pública”, entre otros.
La propuesta emplaza a todos los bolivianos a construir de manera conjunta el camino del país hacia el desarrollo, por ejemplo; “ver cuánto dinero tenemos, año por año, y comenzar a construir el desarrollo hacia el 2025”.
¿Y cómo estamos en casa?
En ese contexto; conviene preguntarnos y ¿cómo estamos en casa?; ¿qué hemos hecho los orureños para mejorar nuestra calidad de vida?, considerando que la espiral de pobreza, de la que en muchos casos las familias no pueden salir, define el futuro de las generaciones presentes y futuras privadas de oportunidades, “excluidas e inmersas no solo en las carencias materiales, sino privadas de la oportunidad de soñar con que un día sus hijos e hijas dejarán de pasar hambre”. (Informe del Milenio)
Me parece que aún no hemos tomado las cosas en serio esta temática, porque creemos que reasfaltado las calles, levantando las aceras unos centímetros más o colocando farolitos antiestéticos y descontextualizados, estamos logrando ese ansiado desarrollo.
Así como el nombre del aeropuerto fue un símbolo para levantar la autoestima del orureño, también así debiera ser nuestra reacción ante la falta de desarrollo, por ello quizás sea importante tomar en cuenta esos trece pilares que propone la Agenda 2025, y tomarle la palabra al Gobierno para planificar estrategias para el futuro de nuestra región.
De acuerdo a la Constitución Política del Estado Plurinacional, los servicios básicos se constituyen en parte fundamentales de los derechos humanos, referido principalmente al agua y el alcantarillado sanitario, así como los servicios de salud y educación, entre otros. Y eso quisiéramos tener los orureños de aquí en adelante.
Por ello cuán importante será planificar el desarrollo de una región tan deprimida como la nuestra, es tiempo de que autoridades, sindicalistas, políticos, etc. empiecen a diseñar planes a mediano y largo plazo para Oruro, cuyos habitantes no tienen mucha esperanza para el futuro, y la agenda 2025 independiente de lo político partidario según el gobierno es un proyecto de país para mejorar la calidad de vida, en el que todos debiéramos participar.¿No les parece?
(*) Es: Licenciado en Comunicación, Catedrático Universitario
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