Cuando se habla del Fondo Solidario la referencia tiene que ver directamente con el sistema que acumula los recursos econ�micos para hacer posible el pago de las pensiones para el sector de los jubilados y que confrontar�a problemas restrictivos en un periodo relativamente corto si en el tiempo presente se aprueba un desmedido aumento porcentual de las pensiones que se distribuyen entre miles de beneficiarios directos.
La mayor�a de los jubilados, los que aportaron por muchos a�os para tener su renta �de vejez� al pasar al sector pasivo, desconoce la serie de problemas que se presentan en el orden de financiamiento del Sistema Integral de Pensiones y su sostenibilidad futura, especialmente si algunas medidas sociales, que se consideran justas pero no equitativas, restan la vida �til del fondo, acortando su vigencia y poniendo en riesgo el pago de rentas a miles de jubilados.
Una propuesta del organismo sindical de los trabajadores ha planteado un determinado incremento para la generalidad de jubilados, aunque se reconoce que la propuesta tiene un elevado porcentaje sectorial que no favorecer� en iguales condiciones a los extrabajadores, muchos que tienen rentas muy bajas que ni siquiera superan los dos mil bolivianos por mes, mientras que hay jubilados que perciben entre siete a quince mil bolivianos y que por supuesto no pueden tener un mismo tratamiento en el incremento de la renta. Vale en este caso la alternativa oficial de disponer un incremento �inversamente proporcional�, de suerte que quienes tienen menos renta se favorezcan con un mayor incremento, pero que de todos modos no deber�a sobrepasar el l�mite de seguridad del Fondo de Pensiones.
Actualmente la Ley de Pensiones 065 establece un presupuesto que en su rentabilidad futura deber�a sostenerse por lo menos unos 35 a�os m�s, sin embargo si se altera el ciclo de los montos calculados para su cumplimiento ese periodo podr�a acortarse sensiblemente dejando a miles de jubilados sin su renta mensual, lo que resultar�a catastr�fico para el sector.
Esta cadena de las pensiones para los jubilados, rentistas y derecho habientes tiene muchos eslabones en su estructura funcional, especialmente en lo que corresponde a la base del fondo econ�mico que da funcionalidad al Fondo Solidario y que proviene del aporte en porcentajes especiales de los trabajadores activos y de las empresas aportantes, de modo que en funci�n a esa fuente que genera � en espiral � la vigencia de rentas se hace necesario pensar en una metodolog�a pr�ctica que aumente el n�mero de aportantes, es decir, de trabajadores fijos que contribuyan con sus empresas al sostenimiento del Fondo Solidario del que m�s tarde depender�n m�s jubilados y sus familiares.
Algo que saben los dirigentes sindicales y las autoridades del gobierno es que los recursos del Fondo de Pensiones son provistos por el contingente laboral formal, que es realmente escaso por ejemplo frente al caso de los trabajadores informales, que no aportan para su renta futura pero que muy bien podr�an ser parte activa del sistema, si se crean las condiciones m�s apropiadas para multiplicar el n�mero de aportantes formales al Fondo de Pensiones sin poner en riesgo mientras tanto su ajustado presupuesto de sustentabilidad.
Todos merecen un incremento en sus ingresos, sean los salarios o las pensiones de jubilaci�n, el hecho es que en todos los casos ese incremento debe ser solidario, equitativo y justo pues no es posible pensar en que existan beneficiarios millonarios y rentistas empobrecidos, el aumento debe ser solidario y adecuadamente equilibrado.
Fuente: LA PATRIA
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