Sábado 27 de abril de 2013
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Editorial y opiniones
La necesidad del hombre de vivir en sociedad y el papel de la juventud
27 abr 2013
Por: Mauricio F. Soria Jiménez
El ser humano, aparte de tener las necesidades de respirar, alimentarse, crecer, reproducir, en fin, tiene quizá una de las necesidades más cardinales, la de vivir en grupo o sociedad.
Según Gustave Le Bon, las sociedades son necesarias para el diario vivir, por la importancia que una sociedad le tiene a la otra.
Para comprender mejor este argumento, observemos un ejemplo simple, un hombre común despierta muy temprano en la mañana, desayuna, enciende el auto, va al trabajo, sale a almorzar, vuelve al trabajo y finalmente llega a su casa, ve la televisión por horas y se va a dormir. Esta rutina será repetida durante la semana.
Repasemos solamente la parte del principio, al despertar el individuo se ayuda en su despertador para poder levantarse, objeto el cual fue diseñado y fabricado por otro individuo en alguna otra parte del mundo, al desayunar un jugo de naranja acompañado de un café caliente y un pan tostado, el individuo utilizó naranjas que fueron cosechadas por otros, una cafetera que obviamente estaba diseñada por otro ser humano y producida en una fábrica manejada por otras personas, el café que tuvo que ser sembrado, cosechado y manufacturado por más materia humana.
