Cactus: Una emblemática especie ícono del altiplano

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Los paisajes del altiplano, para muchos poco atractivos, tienen su encanto propio, pues así pintados con piedras, inmensas pampas, imponentes serranías, están adornados con especies forestales que el capricho de la naturaleza quiso imponer para marcar vida en la aridez del altiplano, sobresaliendo entre ellas los cactus con una variedad de hasta 1.500 tipos.

Los cactus conocidos clasificados como plantas cactáceas que se distinguen por la gran capacidad de almacenar agua en sus tallos, hojas y raíces. Algunas de estas plantas pueden vivir con las raíces fuera de la tierra hasta por seis meses.

El agua toma forma de un jugo mucilaginoso, útil para garantizar la supervivencia de la planta por largos periodos.

Siendo una planta originaria del continente americano, su belleza se plasma más aún cuando deja apreciar al ojo humano impresionantes colores enteros y matizados, plasmados en las flores, sean grandes o pequeñas; sin descartar la gracia de sus tallos y hojas.

SALUD Y ORNAMENTO

Esta planta contiene infinidad de vitaminas C, A, B6 y K. Todas ellas necesarias para mantener una buena salud general del organismo. Concretamente estas vitaminas nos ayudarán a mantener los tejidos en perfectas condiciones y a la hora de conseguir proteger las células de nuestro cuerpo. A esto hay que sumar el aporte mineral que nos brinda, y es que encontramos en su composición altas cantidades de calcio y magnesio.

Al igual que la manzana, el cactus contiene una sustancia conocida como pectina que es la que rodea las paredes internas del cactus que están en contacto con la piel.

Nuestro entorno natural nos ofrece cactus como la tuna, la pasakana, el airampu con adecuadas

bondades para calmar las fiebres.

Tanto en su entorno natural, así como en jardines públicos, institucionales o privados, incluso en masetas, los cactus son plantas ornamentales que le dan al ambiente altiplánico una visión atractiva.

Fuente: LA PATRIA