Jueves 21 de marzo de 2013
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Cuando se trata de medio ambiente quizás es mejor asumir acciones que denunciar los hechos, pues a veces se habla mucho, se muestra lo que ocurre pero si no se pasa del dicho al hecho la situación no cambiará.
Un claro ejemplo se vio cuando comenzaron las movilizaciones de los indígenas de tierras bajas en defensa de su territorio en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), y al poco tiempo, en los diferentes canales de televisión comenzó a salir la propaganda de denuncia de la tala indiscriminada de árboles en esa área protegida.
En la propaganda, pagada por el Gobierno nacional, se denunciaba que habían industriales madereros que explotaban este recurso natural de manera indiscriminada e ilegal, con el argumento de que el Tipnis ya no era territorio virgen realizaron la consulta “previa” para imponer una cuestionada carretera que atravesará por el corazón del parque, que según los habitantes de ese territorio, aún es selva virgen.
Según los resultados de ese proceso la gente consultada aceptó la carretera, la propaganda sobre la explotación ilegal de madera continuó por un tiempo más, sin embargo, no se hizo nada por detener a esas personas que infringen la ley, no se hizo nada contra los grandes industriales que lucran con los recursos naturales y mucho menos se hizo para cuidar dicho territorio, que al ser un parque nacional debiera ser área protegida según la Constitución Política del Estado, al contrario, se quiere hacer una carretera que aunque tenga un mínimo impacto, si es que es mínimo, sobre el medio ambiente, sí afectará a ese ecosistema y a las especies que lo habitan.
Fuente: LA PATRIA