Sábado 02 de marzo de 2013
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Las leyes regulan, norman, la vida en sociedad. Todos estamos sujetos a lo que disponen las leyes. Las leyes constituyen mandatos. Todos debemos acatar las mismas. Promulgada la ley, corresponde su fiel cumplimiento por todos quienes habitamos en el Estado Plurinacional de la República de Bolivia. El no conocer las leyes vigentes, no constituye salvedad alguna, disculpa por desconocimiento, o no correspondiente aplicabilidad.
Leyes, más leyes y más leyes, que en más de las veces las conocemos cuando enfrentamos problemas legales, nos encontramos en dificultades. Leyes que, de las cuales poco o nada nos hablaron en colegio. Leyes que, promulgadas, vigentes, que en poco las conocemos. El pueblo poco conoce de los contenidos de las leyes, a diferencia de quienes viven de ellas, las aplican a criterio, conforme “astutas” argumentaciones, adecuan las leyes al logro de resultados predeterminados, como ser, en muchos casos demostrar la inocencia de culpables. Tal así, la víctima de violación sexual termina siendo acusada o acusado de violación.
Si bien es necesario mejorar el contenido de las leyes vigentes, mucho más importante es verificar la correcta aplicabilidad, la omisión de éstas o no consideración debida de sus contenidos. Por ello, urge efectuar auditorías jurídicas de procesos sustanciados, concluidos, para así determinar no sólo las actuaciones de abogados, sino también de fiscales y jueces que tuvieron participación en tales procesos.