Es deber de todo buen orureño salir en defensa de sus instituciones por encima de cualquier posición política o sectaria que pretenda destruir todo aquello que con esfuerzo se consolidó a favor de la ciudadanía.
En ese afán, considero que la Cooperativa de Telecomunicaciones, precisa de una enérgica y rápida acción de los socios para sacarla de su agónico estado, tanto económico como técnico, en que se encuentra.
El panorama que nos brinda la publicación aparecida en el matutino "LA PATRIA" del domingo 20 de este mes, nos muestra claramente que Coteor, en estos últimos años, fue objeto de un manejo nada responsable al extremo de ponerla en peligro de extinción total.
Muchos dirán que la responsabilidad de esta debacle recae en los socios de la Cooperativa. Ello puede ser cierto, pero no se debe olvidar que en las dos anteriores gestiones, quienes tienen derecho a voz y voto, no podían hacer uso de ese privilegio porque los miembros de los Consejos de Administración y Vigilancia, dirigieron a su criterio y conveniencia las asambleas hasta lograr su objetivo de hacer aprobar cosas que iban, incluso, contra el propio Estatuto Orgánico.
Los resultados de ese pésimo comportamiento administrativo, originó lo que ahora conocemos como "aguda crisis tecnológica financiera".
Quienes nos llevaron a ese estado, merecen el castigo pertinente, porque ya no es posible verlos todavía bien encaramados en funciones directivas, conduciendo a la lenta y trágica muerte de la Cooperativa de Telecomunicaciones Oruro Limitada.
Lo anterior es un paso importante que deben tomar en cuenta los actuales componentes de los Consejos de Administración y Vigilancia, personas en las que los socios confiamos nos sacarán de una situación difícil.
Sin temor a equivocarme, creo que la jornada que se avecina, será algo así como vivir una peligrosa odisea, que debemos afrontarla en base a un trabajo conjunto de socios y directivos allanando caminos escabrosos.
Considero que uno de los principales deberes es que tanto socios y consejos de Administración y Vigilancia, respetemos y demos plena Vigencia al Estatuto Orgánico, que en los anteriores periodos fue manejado de acuerdo a intereses particulares de los señores concejales.
Hoy parece que la figura ha cambiado, porque en la primera asamblea de la gestión Condori-Cabezas, por fin, los verdaderos socios expresaron su opinión sobre la problemática telefónica.
Esa alternativa tiene que mantenerse, echando por tierra todo intento de componendas camarilleras, que en el reciente pasado, provocaron perjuicios al fortalecimiento institucional de Coteor.
No hay duda que todos los que somos propietarios de una línea telefónica, estamos en el deber ineludible de salvar a nuestra Cooperativa, dispuestos, inclusive, a cualquier sacrificio comenzando del señor Oscar Condori Chambi, presidente del Consejo de Administración.
Entonces, llegó la hora de mostrar ante la opinión en general, de lo capaces que somos los orureños de sacar adelante a Coteor, volviéndola a poner en el primer sitial del rubro de telecomunicaciones.
Recordemos que Coteor fue constituida al amparo de la Constitución Política del Estado, la Ley de Sociedades Cooperativas, personería reconocida mediante Resolución Número 03694 de 9 de Septiembre de 1988, inscrita en el Registro Nacional de Cooperativas bajo el número 3407 del 9 de Septiembre de 1988, personalidad de derecho privado y cooperativo de interés social y utilidad pública que presta servicios sin fines de lucro.
Todo lo anterior nos sirva de base para emprender la titánica tarea de salvar a Coteor, cumpliendo en toda su extensión lo determinado en la histórica asamblea del 1º de septiembre de 1999, donde, por voluntad de los socios, arrancó su trabajo a favor del pueblo de Oruro.
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