“Jucus” y “Ninjas” enfrentados en una genialidad cinematográfica
20 ene 2013
Fuente: LA PATRIA
Por: Mónica Aramayo Quinteros
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Inspirado en la vida de las minas, donde el preciado “metal del diablo”, como también se conoce al estaño, motiva la codicia y a la vez la desgracia, el comunicador social, Juan Carlos Soto Pareja, concibió una película cuya trama se desarrolla en los centros mineros de Llallagua, Catavi, Siglo XX y San José.
El título de la película es: “Por el metal del diablo: los Jucus Ninjas”, que nació de los mismos mineros, pues en muchos centros mineros existen los “Jucus” que son ladrones de mineral y los “Ninjas” otro grupo de mineros que también se dedican al robo de mineral; a diferencia de los otros, son más malvados, “volteadores”, que incluso matan a los mineros, y la película gira en torno a sus vidas.
La película dura 90 minutos, es un largometraje, su formato de exhibición y difusión es digital con posibilidades de ser transferida a 35 mm celuloide.
“Bolivia es un país esencialmente minero”, esta es una expresión que se utiliza desde los tiempos más remotos de la historia boliviana. La minería ha llegado a ser un símbolo de una de las más despreciables formas de explotación, eso me inspira, narró Soto.
Detalló que sus personajes actúan para hacer ver que siendo mineros se convirtieron en grupos marginales y se dedicaban al robo de minerales, más conocido como “juqueo”. Sin embargo, estos “Jucus” y “Ninjas” serán la base sobre la que surgirán las cooperativas mineras.
Con el antecedente que en Bolivia, gran parte de los mineros se encuentran en los departamentos de Oruro, Potosí y La Paz, dijo que, lamentablemente, por la falta de empleo muchos que trabajaban en las empresas del Estado y de las cooperativas se han dedicado al robo del mineral (estaño), exponiéndose en condiciones inhumanas y arriesgando sus vidas, en los profundos socavones de las minas.
Realizar la película se debe a muchos factores internos y externos, internos porque parte de la vivencia y experiencia del director y externos porque es una forma de denuncia. La película no es sólo contar una historia de ficción, sino es describir parte de la realidad concreta que se vive día a día en los centros mineros de Bolivia, comentó el autor.
Otra de las motivaciones es la de hacer conocer a la sociedad las condiciones en que viven muchos mineros de Bolivia; concienciar a las autoridades sobre la falta de seguridad industrial en los socavones de las minas. Por otra parte, es mostrar la riqueza cultural (rituales, costumbres, ceremonias) que tiene este grupo social marginado por mucho tiempo.
Se eligió los centros mineros de Llallagua, Catavi, Siglo XX y San José fundamentalmente, porque es allí donde se concentra la mayor cantidad de estos personajes, también se debe a que en esos lugares existen locaciones naturales impresionantes para la filmación.
SINOPSIS
Es la historia de la vida en los centros mineros, donde se reflejan varias vidas paralelas: comienza cuando un grupo de mineros luego de ser despedidos de la empresa, se convierten en ladrones de mineral; por otra parte, existe otro grupo de mineros que son de la empresa y piden a los dueños de la mina mejores condiciones de trabajo y seguridad, ya que varios mineros han muerto en cumplimiento de sus funciones. Los dueños no hacen caso, este hecho termina en un enfrentamiento entre mineros y militares. De la misma manera, los jucus al ser asaltados por los ninjas deciden contratar a unos matones, este aspecto termina con la muerte de dos ninjas.
Paralelamente, se muestran escenas del consumo de alcohol en los mineros; explotación laboral; costumbres y tradiciones, como la fiesta de la Virgen de Asunción, la festividad de Cala Cala; ceremonias al “tío de la mina”; fiesta del matrimonio andino; la vida urbana de Cochabamba y Santa Cruz; identidad y cambio de actitud de las personas; abusos por parte de los militares, desclasamiento social, la vida de los niños y mujeres mineras; finalmente, la historia desemboca en un enfrentamiento entre mineros y militares con el desenlace de varios muertos y heridos.
“La idea de la película nació el año 2003 en Llallagua, ahí vi algunas historias que me impresionaron, y otra motivación fue mi propia experiencia de visitar interior mina para la realización de un documental como parte del programa nacional “Viajero Tv cultura” de mi amigo Aldo Peña. Es a partir del año 2003 que empiezo a escribir el guión hasta el 2007 y el 13 de agosto del 2008 se inicio al rodaje en Llallagua con motivo de la festividad de Asunción; en septiembre del mismo año filmamos en la población de Cala Cala de Oruro, luego entre octubre y noviembre grabamos en Llallagua, Siglo XX, Catavi. Finalmente, a partir de julio del 2012 se grabó en Cochabamba, luego en Santa Cruz y concluimos el rodaje el pasado mes de agosto en Oruro”, detalló.
ACTORES
La película cuenta con actores de primer nivel como “Cacho” Mendieta, Jorge Jamarlli, Elías Serrano quienes trabajaron en varias producciones bolivianas y extranjeras; también está Eloy Apaza “Chililín”, Nelson Serrano, Dick Arias, Adolfo Peláez, Ariel Coca, Marco Molina, Alberto Molina, Roberto Clavijo, Cristian Márquez, Samuel Calani, Carolina Martínez, Marcelo Marconi, Eduardo Max Arista, Daniel Cavero, Milton Portugal, Nelson Arnez y el cantautor cruceño Aldo Peña. Además de alrededor de 400 personas entre actores secundarios, extras y figurantes.
El equipo técnico y de producción está compuesto por profesionales de primer nivel que ya trabajaron en otras películas nacionales, como Homero Rodas, productor; Osvaldo Hinojosa, director de fotografía y cámaras; Marcelo Murillo, jefe eléctrico; Gonzalo Guzmán, asistente de fotografía; Jorge Guzmán, gaffer; Juan Pablo Rojas, sonido; Andrés Zúñiga, asistente de sonido; Paola Galindo, continuista; Emilia Tórrez, asistente de producción; Ariel Coca y Marco Molina, como making off; Gabriel Arce y Geraldine Chávez, asistentes; Drina Webster, maquillaje; Castel Vargas, arte y vestuario; Elvis Antezana, director de actuación, entre los principales.
Actualmente el equipo comandado por Juan Carlos Soto, está en etapa de la postproducción, se tiene prevista la culminación de la película para fines de febrero, el estreno en el mes de marzo y de la misma manera, se promociona la película en Argentina y Uruguay.
SEMBLANZA
Juan Carlos Soto, es orureño, presidente de la Asociación de Trabajadores de la Imagen de Oruro, director ejecutivo de la Revista Nacional e Internacional “URUS”, director general de la productora de Cine y Video “Encuadre”, del programa televisivo “Cámara en Mano”. Actualmente es docente de la carrera de Comunicación Social y Diseño Gráfico de la UMSS de Cochabamba.
Fuente: LA PATRIA
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