Por lo que observamos a menos de un mes de la celebración revolucionaria de Oruro el próximo 10 de Febrero, como ya sucedió en años anteriores, este tampoco será nuestro mes pues nuestros más importantes proyectos quedarán simplemente en el contenido del repetitivo pliego petitorio orureño.
Para empezar, por esas cosas del calendario nuestro aniversario cae en el domingo de Carnaval, ese hecho obliga a un adelanto de fechas en el programa de homenaje al movimiento revolucionario de 1781 y el Carnaval ya sabemos que absorbe el interés generalizado de propios y extraños, por tanto cualquier cosa que suceda quedará minimizada hasta después de la Tentación, cuando los humos de otro Carnaval se esfumen paulatinamente y recuperemos del trajín de varios días festivos para retomar la conciencia cívica que de manera antelada se presenta con fuerza, pero sólo en la teoría cívica que es parte de una letanía que no produce la fuerza necesaria para imponer nuestras razones.
Se habla de todo un poco en los círculos próximos a la Gobernación o el Municipio, obras más, pintura a discreción, refacciones obligadas para mostrar buena imagen a miles de visitantes, lo que más bien es parte del Carnaval y qué carnaval, que los orureños celebraremos con doble efecto, pero que en el hecho real, posiblemente sirva sólo para dejarnos algo adormecidos con el jolgorio de un 10 de Febrero en pleno Carnaval.
Pero no todo está dicho y será hecho, hay una esperanza de que se cumplan algunas promesas que provienen de la superioridad gubernamental donde el capitán que manda es oriundo de la región y muchos marineros tendrían que acatar algunas medidas que estamos esperando en Oruro desde hace tiempo.
Ya sabemos que el Aeropuerto Internacional comenzará a funcionar con vuelos de tipo comercial, por lo menos tres empresas aéreas así lo han hecho saber, aunque se advirtió que todavía no existirá el equipamiento necesario para la atención adecuada de centenares de viajeros, oficiales y turistas.
Se ha reclamado insistentemente y se ha encomendado a los parlamentarios la misión de hacer el seguimiento a la comisión que debía redactar reglamentos de hasta tres leyes de incentivo al asentamiento de industrias en Oruro, y sería un buen regalo a la orureñidad si tales documentos pudiesen ser presentados.
La habilitación del Puerto Seco sigue entrabada por cuestiones de forma y no de fondo, por tanto lo que correspondería en homenaje a Oruro es una decisión del orden político superior que ordene avanzar sin pausas en el establecimiento legal del proyecto y seguir luego en la fase operativa de su implementación.
La minería de manera general está esperando la aprobación de la nueva ley de minería, pero Oruro necesita una medida de excepción para encarar la reactivación de su minería regional, con un apoyo financiero extraordinario que permita a sus industriales mineros medianos, chicos, cooperativistas y al sector estatal alentar un proyecto sectorial que comience con la exploración de nuevos yacimientos para su futura y sostenible explotación.
Los orureños estamos esperanzados en que febrero será nuestro mes y que podamos festejarlo como corresponde, por lo menos ya tendremos la gigante imagen de la Virgen del Socavón bendiciendo y protegiendo a los orureños y a nuestros visitantes.
Fuente: LA PATRIA
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.