Los seres humanos, lo mismo sucede con la mayoría de las especies animales, se desplazan en la superficie terrestre en unos movimientos individuales o colectivos que se denominan migraciones, los motivos de las migraciones son ocasionadas por satisfacer los incentivos de sobrevivencia.
El éxodo rural se refiere a la migración generalmente de gente joven, adolescente o adulto joven del sector rural para establecerse en la ciudad, fenómeno consistente en cambio del lugar de residencia, que obedece a los motivos forzados para mejorar su sistema de vida.
El origen del éxodo de la población indígena originaria campesina hacia los centros urbanos, son causados por los siguientes factores:
- La escasez de fuentes de empleo, que afecta en mayor grado a la población femenina y jóvenes, por lo que las mujeres tienden a predominar el éxodo rural.
- La tendencia a disminuir del desarrollo integral de la agricultura y ganadería, genera bajos ingresos económicos para la vida, resolución de desafíos del futuro y cubrir las necesidades apremiantes de la familia rural.
- La escasez de institución de enseñanza competitiva, que brinde una educación motivadora a la producción para generar equilibrios entre la comunidad, la Madre Tierra y el Cosmos, además, hay que sumar las largas distancias a recurrir para llegar a una escuela o colegio.
- La escasez de servicios; entre ellos hay que destacar a los asistenciales, de comercio, de formación, asesoría técnica y muchos otros aspectos, cuyas consecuencias negativas dio origen la motivación del fenómeno de la migración de familias íntegras a centros poblados para satisfacer la sobrevivencia de la familia.
El contexto de las ciudades ejercen un ambiente atractivo muy poderoso sobre la población rural, la cual se manifiesta en la oferta de todos aquellos elementos que suelen ser más difíciles de conseguir en área rural, pues poseen una mayor diversidad de empleos, disponibilidad de servicios, mientras el ambiente rural carece de empleos fuera de las actividades relacionadas con las labores agropecuarias.
Las consecuencias del éxodo rural son positivas: disminuyen la presión de la población sobre los recursos, la adaptación de su sistema de vida en un contexto diferente, generan iniciativas emprendedoras de superación constante, reduce el desempleo y la miseria en área rural.
Son negativas: disminuye la vitalidad de la población rural, desequilibrios en la composición de la población por edad y sexo, las consecuencias y el sacrificio a la adaptación de su sistema de vida en un contexto diferente, el abandono de las condiciones sociales culturales, los saberes, conocimientos ancestrales de la comunidad, la Madre Tierra natal y la cosmovisión local.
Los seres humanos a diario experimentamos diferentes tipos de migración, que son: la migración temporal, migración de mantenimiento y migración de ruptura. La migración temporal se refiere a las personas que migran a las ciudades por un cierto tiempo, van a trabajar a la ciudad por algunas semanas, meses o un par de años, luego retornan a su lugar de origen, la migración de mantenimiento es la gente que vive entre la ciudad y el campo, es decir, muchos tienen casa en la ciudad y en el campo, normalmente las mujeres viven la migración de mantenimiento porque siempre están viajando a sus comunidades de origen en las fiestas, en la época de siembra y cosecha a ejercer algún cargo, y la migración de ruptura se refiere a la gente que abandona la tierra de origen, ya no retorna más, se van para siempre.
A consecuencia del éxodo de la población rural, muy particularmente en el sector altiplano, en las comunidades indígena originaria campesinas, solamente se está quedando la población de la tercera edad, cuyo fenómeno afectaría al cierre de algunas unidades educativas de la región, por falta de estudiantes.
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