Retan al sector privado a invertir, empresarios reclaman seguridad
31 dic 2012
Fuente: LA PATRIA
Prácticamente al cierre de la gestión el segundo mandatario del país lanzó de manera pública un reto al sector privado del país para que apoye los planes gubernamentales por la vía de la asociación de capitales y propósitos. La respuesta fue inmediata y los empresarios señalaron su predisposición asociativa, pero con reglas claras que den certidumbre para invertir.
Una vez más el Vicepresidente Álvaro García solicitó de manera directa a los empresarios privados del país “mayor iniciativa y mayor audacia” para sumarse a los proyectos que encara el Gobierno con fines de un crecimiento sostenido en función de los intereses de cambio y de progreso nacional.
En realidad la propuesta pública tiene la intencionalidad de “tentar” al empresariado para que pueda invertir en los proyectos del Estado que según el vicemandatario este nuevo año tendrá un gasto superior a los 5 mil millones de dólares en inversión pública, es la proyección en la estrategia financiera, aclarándose empero que el Presupuesto General del Estado (PGE) para el nuevo año prevé un 10 por ciento más de inversión pública respecto al año 2012, de modo que de 3.468 millones se subirán a 3.807 millones de dólares.
Según los datos que manejan las autoridades económicas del país del total presupuestado para la nueva gestión, el 72 por ciento se destinará a los proyectos de infraestructura y de manera especial a los que corresponden al rubro de carreteras, compartiendo esa cuenta con los planes que sean implementados para el sector productivo.
Un hecho rescatable en la oferta oficial es la que remarca la intencionalidad de que recursos que destina el Gobierno central para cubrir los gastos de los “gobiernos sub nacionales”, entendiendo tal aspecto como municipios y gobernaciones, además de las contrataciones de obras y servicios que realiza el Poder Ejecutivo pase a manos de firmas bolivianas, en este caso del empresariado nacional.
La oferta del sector oficial tiene que plasmarse con medidas muy claras traducidas en una serie de elementos que el sector empresarial del país ha estado reclamando desde hace tiempo y que se relacionan de manera directa y especial con seguridad jurídica, con reglas muy claras que incentiven las inversiones, pero al mismo tiempo las garanticen y permitan engranar ese componente ideal de tipo societario entre Estado y Empresariado privado.
Si hay la buena predisposición del Gobierno para encarar ésta nueva forma de actividad conjunta entre los dos sectores más importantes del sistema productivo nacional demás está decir que los beneficios para terceros serán también positivos, pues se producirá una evidente multiplicación de servicios, utilizando a los micro, pequeños y medianos industriales, para satisfacer los emprendimientos de los proyectos que sean delineados para su ejecución en diversos rubros de actividad.
El reto ha sido lanzado y la respuesta ha sido inmediata, por tanto corresponde a los dos sectores, Gobierno y empresarios, plasmar en realidad un hecho que puede ser significativo en la dimensión de su proyección para consolidar los proyectos más importantes en el desarrollo industrial boliviano con una sólida interacción de capitales, capacidad profesional y voluntad política.
Con el último proceso nacionalizador de empresas distribuidoras de energía eléctrica, otra vez surgen las dudas sobre el respeto a las inversiones, vale la pena despejarlas, para no crear susceptibilidades.
Fuente: LA PATRIA
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