Los últimos entredichos entre el Ministro de Gobierno, Carlos Romero, y al presidenta de la Cámara de Diputados, Rebeca Delgado, muestran profundos desniveles educativos y patética escisión en esferas gubernamentales del Movimiento al socialismo (MAS) jefaturizado por el Presidente, Evo Morales, exhibiendo, cada uno, sus atributos sean éstos académicos o no, marcando diferencias en la interpretación del proyecto de Ley de Extinción de Bienes a favor del Estado.
Delgado, en reunión pública realizada en Quillacollo, afirmó que no se pueden construir leyes en “gabinetes de abogados” porque éstas deben surgir del sentir de las necesidades del pueblo. Aquel proyecto que llegó al Legislativo, dijo, no ha sido analizado tomando la opinión del pueblo y la expresión de muchos sectores sociales, prefiriendo que el Gobierno envíe el documento al Tribunal Constitucional, cuando el Legislativo no lo consideró.
El Ministro de Gobierno en arranque de malestar, afirmó que la expresión de Rebeca Delgado no le tiene cuidado “porque existen diferencias entre mi persona y la presidenta de Diputados considerando que ella haya elaborado una propuesta seria en su vida ni que haya desarrollado una investigación académica”.
Romero sin quedarse corto en su declaración llegó al egocentrismo, afirmando: “Yo tengo muchísimos años de investigación, libros publicados, muchísimas propuestas legislativas y un trabajo que me autoriza moralmente a expresarme en otros términos en este proceso histórico que vive el país, lo que no puede decir la señora Delgado”. Reiteró que le tiene sin cuidado; “no voy a debatir con una persona (Delgado) a la que considero que está muy lejos de mi trayectoria política y académica”.
La diputada sin pretender abrir brechas en los antagonismos, respondió a Romero, atribuyéndolo a malas interpretaciones a sus declaraciones, pero lamentó las expresiones utilizadas por el Ministro que fueron duras y ofensivas. Añadió: “Lo que es cierto es que nosotros, los representantes del pueblo, más allá de las opiniones que puedan haber de diferentes personas, hemos sido elegidos por el pueblo; nosotros no hemos sido elegidos a dedo y vamos a continuar nuestra tarea, porque algunos proyectos de leyes emergen de gabinetes jurídicos, es decir a puertas cerradas y cuatro o cinco abogados”.
Antes que corra más agua en aquellas diferencias, al parecer, el Presidente Morales tuvo que intervenir en los diálogos mediáticos entre ambos dignatarios de Estado; sin embargo, la diputada ahondó diferencias con Romero insistiendo en un debate porque el Proyecto de la Ley de Extinción de Bienes estuvo mal elaborado; al contrario hizo conocer que en la Cámara de Diputados se elabora un proyecto de ley integral en contra de la violencia contra la mujer para eliminar conductas patriarcales, colonizantes, discriminatorias y ofensivas, refiriéndose con disimulo a las versiones del Ministro de Gobierno.
(*) Periodista
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