La situación tributaria de varias empresas que operan en el Departamento de Oruro se registra en La Paz y hasta hay algunas que lo hacen en Cochabamba y Santa Cruz al tener registradas sus oficinas centrales en esos distritos, sin embargo su negocio y captación de servicios, bienes y recursos se produce en los límites orureños.
Este asunto del registro de empresas en un distrito y sus operaciones cotidianas en otro ha sido tema de análisis en niveles institucionales en nuestra ciudad, justamente observando con mucha preocupación el caso de algunas empresas mineras y otras financieras que desarrollan sus actividades en el medio local pero tributan mediante sus centrales en La Paz u otras sedes, restando ingresos a las arcas departamentales, pese a que sus utilidades son percibidas de manera concreta en Oruro.
Han corrido trámites diversos de manera directa con las empresas e instituciones que tienen el problema señalado, existió mediación de entidades cívicas, empresariales y laborales para exigir la aplicación de disposiciones concretas estableciendo la responsabilidad de pagar impuestos allí donde se produce el hecho comercial o el negocio regularmente activo. En muy contados casos funcionó el reclamo, aunque sólo por tiempo determinado al no existir normas estrictas y una adecuada conminatoria al cumplimiento de las correcciones impositivas.
Oruro necesita fortalecer su economía, necesita recuperar todos los rubros que generan ingresos para ampliar su presupuesto de sostenimiento y el rubro de impuestos significa uno de los más fuertes en materia de ingresos para cubrir los costos que demandan los proyectos de desarrollo, infraestructura vial, electrificación y otros de apoyo comunitario.
Frente a esta situación, que persiste y merece ser subsanada con disposiciones concretas se menciona que el ordenamiento de la estructura administrativa departamental a partir de la aprobación del futuro estatuto autonómico, permitirá regular está anomalía que le resta ingresos al Tesoro Departamental y que en el marco de la autonomía administrativa en el futuro deberá rendir frutos directos a la economía orureña, sin alternativas de ninguna especie que distraigan el cumplimiento de las empresas a tributar allí donde hacen su negocio.
Un primer paso y que podría ser puesto en práctica cuanto antes es actualizar el registro de aquellas empresas públicas y privadas que asentadas en Oruro tributan en otros distritos, cuando el factor de equidad contributiva aconseja que al percibir utilidades de cualquier especie, las mismas deben y tienen que contribuir allí donde obtienen beneficios financieros.
Es necesario que se trabaje en la elaboración de estas normas específicas que deben adecuarse a la realidad económica de cada departamento y en el caso de Oruro apuntando a establecer, mediante el estatuto autonómico, las leyes regionales que perfilen la obtención de la mayor cantidad de recursos financieros como base del sustento que vaya a generarse y utilizarse en la futura administración descentralizada de nuestro distrito.
Fuente: LA PATRIA
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