Sábado 27 de octubre de 2012
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Estamos a pocas horas de celebrar los 406 años de la fundación de la noble y leal Villa de San Felipe de Austria, que por obra divina hizo que los españoles se asienten en esta región para hacer en el futuro una de las más importantes del continente americano, por su estratégica situación geográfica.
Si todos los caminos van a Roma, todos los caminos también pasan por Oruro y esa situación es una gran verdad, pero la verdad de las verdades, es que pese a tener esa ventaja, no sabemos aprovecharla y ¿por qué?, porque sencillamente el orureño en el último tiempo se ha caracterizado por adquirir un cáncer, y adoptar un comportamiento de criticar y no dejar hacer nada.
Alguien propone y todos le ponen “peros” o simplemente se dedican a hacer críticas destructivas y nunca hay un criterio unificado, la idea es destruir con las palabras las acciones que se intentan hacer y eso no debe ser así.
El orureño de hace algunas décadas no tenía ese comportamiento, por el contrario lo que hacía era apoyar todas las iniciativas para lograr un objetivo, no por algo tuvimos el primer tren, las primeras calles asfaltadas, fue la primer ciudad con electricidad, etc., etc., y etc.
Fuente: LA PATRIA
